domingo, 25 de febrero de 2024

El Draft

 


La planificación de personal médico especializado no es sencilla; por el contrario, es una tarea de gran complejidad técnica, administrativa, académica y financiera. Para ello se emplean enfoques y métodos de planeación modernos, integrales y en ocasiones sofisticados, a fin de lograr la convergencia entre la oferta de médicos especialistas y la demanda de servicios médicos especializados.

 

Se espera que más de once mil médicos residentes, quienes están cerca de egresar en sus respectivas especialidades, podrán competir para ser parte de la jornada de contratación de médicos especialistas conocido como Draft. Esto luego del incremento que ha existido, pasando de cuatro mil becas para los médicos a más de nueve mil puestos de trabajo en el sector. Durante el año pasado de ofertaron 5 mil 200 plazas para mil 624 hospitales. En esta ocasión la convocatoria está en la búsqueda de especialistas en Cirugía general, Anestesia, Gineco-obstetricia, Pediatría, Medicina interna, Ortopedia, Psiquiatría, Cardiología, Urgencias, Neonatologías, Oftalmología, Dermatología, Anatomía patológica, entre otras. El residente decide qué especialidad va a realizar, todo este proceso deberá desarrollarse en el marco de referencia de la Norma Oficial Mexicana NOM-001-SSA3-2012, Educación en salud. Para la organización y funcionamiento de residencias médicas. Tiene la opción de escoger la especialidad que le interesa y asume por ello la forma de trabajo de cada institución, debiendo reconocer las obligaciones y los deberes para con la universidad a la que esté incorporado cada curso y también para cumplir con las regulaciones y cultura de la institución sede. Así de igual manera cuando egresa, deberá elegir su lugar, de manera voluntaria con las opciones que se le presentan durante el Draft. Ahora bien, existen diversas opciones en nuestro sistema de salud, primero se debe tomar en cuenta que contamos con un sistema de salud “fragmentado” por instituciones en donde IMSS en su régimen ordinario es quien oferta la mayoría de las vacantes, seguido por IMSS Bienestar (antes Secretaría de Salud) posteriormente ISSSTE, PEMEX, SEDENA y Hospitales privados. Posteriormente el médico toma en cuenta a qué lugar desea acudir y que vacantes estarán disponibles, ya sea contratación de base (permanente) o eventual. Hasta aquí entendemos que está a voluntad del médico, elegir donde desea laborar de acuerdo a las vacantes disponibles. Ahora bien, si algunas instituciones tiene déficit en cuanto a una especialidad en específico, deberá ofertarla y hacerla atractiva para el médico, es decir, ofrecerle un Plus. ¿Es válido? ¡Por supuesto! Es donde entra el principio del “ganar-ganar” en donde ambas partes se benefician. Pero no todo queda en la institución. Si una ciudad tiene déficit en algunas especialidades y sus hospitales ofertan vacantes para las mismas, ¿a quién le interesa, o debería (además de la institución) llenar estos espacios? ¡Exacto! A sus representantes populares encabezados por el alcalde de la ciudad en turno para beneficio de sus representados y habitantes. Pero no todos se interesan o conocen esta modalidad. Un representante popular llámese alcalde o diputado, en gran parte de las ocasiones llega sin contar con la preparación o conocimientos básicos para desempeñar el cargo para el cual fue elegido pero nuestro sistema democrático funciona así ¿Quién lo llevo a dónde está? Los votantes. Cuando el representante popular está interesado, comprometido y le interesa resolver el problema del “desabasto” de especialidades en su lugar de origen, va a “tocar puertas” con un plan de trabajo para promover su lugar. Durante el Draft nos encontramos no solo a las instituciones que desean hacer atractivas sus vacantes, también nos encontramos (para sorpresa de muchos) con alcaldes comprometidos que van a dar ese Plus para sus lugares de origen haciendo aún más atractivas las vacantes para las especialidades que desean captar.

 

Cuando llegue al Draft, al término de mi especialidad, me sorprendió ver a la alcaldesa de Coahuila preocupada por resolver el problema de falta de médicos especialistas en su ciudad, la alcaldesa ofrecía créditos de vivienda, automóvil y facilidades. El alcalde de Monclova ofreciendo créditos de vivienda, y 20 mil pesos en efectivo. Alcalde de una ciudad que no recuerdo de Yucatán, ofreciendo crédito de vivienda y un automóvil que su ayuntamiento proporcionó para la movilización del médico. Algunos alcaldes en compañía de sus diputados locales haciendo labor de convencimiento con mucho empeño en beneficio de sus ciudades de origen resolviendo el problema a veces con ofertas, a veces con el puro convencimiento. Bien por esos representantes que contribuyen no solo a hacer atractivos sus lugares de origen, sino que resuelven un problema de gran complejidad administrativo y financiero que repercute en su mayoría en la atención a los pacientes. ¿Cuántos de sus alcaldes estarán interesados en resolver el problema del desabasto de especialistas en sus ciudades? Veremos.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

domingo, 18 de febrero de 2024

La cama de hospital.

 


Las unidades médicas hospitalarias son espacios de atención en las que interactúan diversas especialidades médicas, así como otras disciplinas científicas de las áreas administrativas, que en su conjunto conforman la red de procesos de la atención médica siendo además el lugar donde se atienden los problemas de salud más complejos de la población.

 

Hay muebles que todos identifican, pero probablemente, la cama es el más representativo; es una de las invenciones más trascendentes de la humanidad, todos los hombres las conocen, las usan, hablan y hacen referencia a las camas. Indican su tamaño, ubicación, materiales, color, comodidad, costo, etcétera. Las camas son esenciales en la vida del hombre, en las mismas se pasa la tercera parte de la existencia y tienen múltiples usos: encierran vivencias y experiencias diversas, satisfacen diversas necesidades, en las mismas se suele nacer, vivir, descansar y morir. Conocer con qué y cómo los servicios médicos hospitalarios atienden a sus usuarios, considerando los recursos disponibles, se convierte en un verdadero reto, dadas las diferentes variables que influyen en la atención del paciente, pero que en su conjunto determinan la eficiencia hospitalaria. Entendemos que la eficiencia se define como “el grado en que se alcanzan los resultados deseados, con los recursos disponibles”. La OMS identifica tres causas de ineficiencia en los servicios sanitarios que involucran directamente a los servicios hospitalarios: las admisiones hospitalarias, la duración de la estancia inadecuada y la subutilización de los recursos disponibles. Al ser la cama la base de la estructura hospitalaria, el análisis de los indicadores hospitalarios que miden el volumen y aprovechamiento de esta permite evaluar aspectos concretos de la eficiencia, brindando información valiosa sobre los servicios que un hospital ofrece. La eficiencia puede medirse en los niveles existentes de capacidad ociosa o en la estructura de recursos que reflejan excesos o carencias en determinados rubros. Una de las causas de ineficiencia en los servicios hospitalarios referida en la literatura es el tamaño inadecuado de algunos establecimientos, por lo que la cantidad de camas instaladas en una institución determina positivamente los resultados de los indicadores. Existen situaciones como los servicios con alta demanda de atención y capacidad instalada rebasada, así como servicios con baja demanda de atención y capacidad instalada subutilizada, los cuales probablemente contribuyan al no colapso de los servicios con mayor demanda al ceder su capacidad ociosa instalada. Esto se rediseño con la conversión hospitalaria durante la pandemia de covid19. También existen servicios con indicadores que señalan la prolongada estadía de los pacientes al presentar más días hospitalizados que los esperados, condición que también se refleja al indicar lentitud en la ocupación de una cama posterior a un egreso. Esta situación probablemente se deba a la complejidad de los padecimientos que se atienden en los servicios, derivado de la actual carga de enfermedad en la población, sin embargo, se abre una ventana de oportunidad para la revisión, entre otros condicionantes, de los protocolos de atención médica con los que los pacientes son atendidos. La subutilización en otros servicios, permite abrir líneas de investigación operativas que determinen, si en estos servicios no existe demanda de atención, o bien, al existir la oportunidad de ceder sus camas, de forma intencionada no se ingresen pacientes a hospitalización. En años recientes, las estrategias para disminuir el gasto hospitalario se han basado en la reducción de las camas hospitalarias, la disminución de las estancias y la reducción del número de ingresos, por lo que las alternativas propuestas a esta problemática son: la reorganización física de los servicios y ajustar el indicador por tipo de pacientes atendidos en los servicios por medio de algún sistema de clasificación de pacientes, como los grupos de diagnósticos relacionados.

 

Los nuevos instrumentos de gestión deben ir encaminados a intentar predecir los niveles de ocupación de camas con el fin de hacer un uso más eficiente de las mismas, al eliminar el exceso de capacidad. El número total y proporcional de camas disminuirá debido a la presencia de servicios ambulatorios: hospital de día, cirugía mínimamente invasora, hospitales a domicilio y terapéuticas extra hospitalarias; además, dejarán de ser las determinantes en el funcionamiento de los hospitales: habrá otras tecnologías que caracterizarán al hospital. Si esto no se contempla a futuro, el sistema continuará dando de qué hablar y el gasto seguirá siendo muy alto, que no alcanzará presupuesto para atender el problema.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

domingo, 11 de febrero de 2024

A merced del Bienestar.

 


En medicina siempre tenemos un dicho: para cada argumento siempre se debe tener un sustento; de lo contrario sería algo similar a un simple chisme. La importancia de la medicina basada en evidencia es en la actualidad un instrumento apropiado para hacer frente a la práctica médica y su implantación es ya una obligación para el profesional de la salud, que terminará viendo su ejercicio como algo natural, consustancial a su profesión.

 

La medicina basada en evidencia, es el proceso cuyo objetivo es el de obtener y aplicar la mejor evidencia científica en el ejercicio de la práctica médica cotidiana. Las observaciones personales, tan frecuentemente expresadas “en mi experiencia” van perdiendo peso por la información sistematizada obtenida de la comunidad científica. La medicina ha ido evolucionando y avanzando mediante el pensamiento y el método científico, no podemos tener creencias como el dios de esto o de aquello que va resolver un problema de salud. Lo preventivo y lo predictivo del paradigma actual, no son atributos nuevos. Se conocen bien las ventajas de prevenir enfermedades a partir de la capacidad predictiva de modelos matemáticos. La medicina se hace más precisa, científica, segura y eficaz. Además, se coloca un gran énfasis en la prevención, puesto que el conocimiento del perfil genético de un paciente conducirá a identificar igualmente algunos de los factores de predisposición a una enfermedad y todo ello gracias al método científico. La medicina basada en evidencia tiene el potencial de detectar precozmente la aparición de una enfermedad, de aumentar la adherencia de los pacientes a su tratamiento al disminuir los efectos secundarios de un medicamento, de mejorar su salud de manera general, y de obtener una visión global de la enfermedad, del pronóstico, así como de la atención requerida. Para todo esto contamos con las Normas Oficiales Mexicanas, mismas que desde el año pasado pretendían desaparecer, pero ¿Por qué? El pasado 30 de Enero del presente año de publicó en el DOF la primera fase para cancelar NOM, que de acuerdo con el Programa  Nacional de Infraestructura de la Calidad 2024, se encuentran algunas que tienen que ver con temas de gran importancia, como: Cáncer cérvico uterino; Cáncer de mama; Cáncer de la próstata; Vigilancia epidemiológica; Fomento, protección y apoyo a la lactancia materna; Prevención y control de la tuberculosis; Promoción de la salud en las escuelas; Manejo de la diabetes mellitus; Manejo del cólera; Control del complejo taeniosis/cisticercosis; Prevención y control de la brucelosis; Prevención y control de la lepra; Manejo de la hipertensión arterial; Atención a la salud infantil; Control de enfermedades transmitidas por vectores; Salud en la perimenopausia y postmenopausia; Manejo de las dislipidemias; Prevención de infecciones de transmisión sexual. Las Normas Oficiales son estándares mínimos de calidad que deben ser acatadas por todo el personal médico: el sector privado, los organismos públicos descentralizados o la Secretaría de Salud. Al desaparecer las regulaciones técnicas de salud, también llamadas NOM, se pone en riesgo la calidad de medicamentos, la atención en centros de salud y limita la obligación de determinados servicios. Incluso potencia violaciones al derecho universal de la salud y aumenta los riesgos sanitarios. Hay quienes comentan que no son necesarias, sin embargo desaparecen el sustento jurídico en muchas situaciones. ¿Qué pasa si desaparece el reglamento de tránsito? La población sabe (en teoría) las reglas de donde debe estacionarse o cuando hacer un Alto, en eso estamos de acuerdo, pero al momento de cometer una infracción, el sustento es ese mismo reglamento, si no hubiese un reglamento no justificarían una multa, es decir, no habría un sustento legal para la misma. Lo mismo sucede con las NOM.

 

La cancelación de las NOM deja en desamparo a miles de mexicanos y pacientes que luchan con alguna enfermedad, es decir; si una NOM recomienda realizar una mastografía cada dos años después de los 40 años, cada unidad determinará la frecuencia de realizar el estudio para la detección o bien, si se realizará o no. La práctica médica queda sin reglamento a juicio de cada unidad, y sobre todo sin poder hacer algún reclamo al gobierno simplemente por ya no existir ningún sustento jurídico que obligue alguna practica no conveniente para el sistema de salud en crisis, como realizar algún estudio o proporcionar algún medicamento de alto costo como el medicamento oncológico. Quedamos, simplemente a merced del Bienestar.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

domingo, 4 de febrero de 2024

Juan Pueblo

 


La enfermedad renal crónica es la resultante de diversas enfermedades crónico degenerativas, entre las que destacan la diabetes mellitus y la hipertensión arterial, fenómeno que ocurre de manera similar en todo el mundo y que, lamentablemente, conduce hacia un desenlace fatal si no es tratada. 

 

Juan Pueblo es un adulto mayor de 62 años, el habita en la zona rural del estado y se desempeñaba en el trabajo de campo, al igual que sus vecinos en la comunidad. Un día Juan Pueblo acudió a su centro de salud local donde le comentaba a su médico que se había sentido más cansado de lo normal, tenía dolores de cabeza frecuentes y notaba que sus piernas se le hinchaban, fue cuestionado por su dieta a lo que respondió que él come lo usual, “lo que hay y cuando hay”; en el desayuno es: tortillas con ocasionalmente carne, ingiere a medio día refresco de cola para soportar el calor del día y para “agarrar fuerzas” en su difícil tarea, de vez en cuando acude al abarrotes por algún pan dulce para rematar, pero aclara que no es de todos los días, y una que otra cerveza los fines de semana desde su juventud. El médico le comentó, posterior a realizarle estudios que padecía de enfermedad renal crónica, tenía una diabetes mellitus subclínica, es decir que nunca se la habían diagnosticado y había estado de alguna manera “compensado” sin embargo sus riñones sufrieron la consecuencia de la enfermedad y que debía acudir con un especialista en el hospital más cercano. Juan Pueblo estaba angustiado, pues él nunca se había sentido mal, y decidió tratarse en su domicilio con remedios caseros, nunca ajustó su dieta y a los pocos meses acudió de nuevo a su médico, quien le comentó que era urgente que lo revisaran en un hospital por lo que decidieron enviarlo por medio de la cruz roja que estuvo disponible horas más tarde. Al llegar al hospital, de la zona urbana le comentaron que era candidato a dializarse, cosa que impresionó mucho a Juan Pueblo y sus familiares, ya que alguna vez recordaron a un vecino que traía un catéter cerca del cuello y se iba a dializar a un hospital muy grande y poco después falleció. Él no sabía que su vecino era trabajador formal y derecho habiente del IMSS, su vecino recibió un trasplante renal y años después hemodiálisis que le realizaban en su unidad de derecho habiencia. Juan Pueblo asociaba ese término con una fatalidad que él no comprendía del todo. Le comentaron que era similar a la de su vecino pero como en su unidad no contaban con esos aparatos, tenían que colocarle un catéter en el abdomen para realizarle diálisis peritoneal, y que sería en otra unidad más lejana a la de su domicilio, y el traslado sería por su cuenta ya que tampoco contaban con el beneficio de traslado; así pues se le otorgó una lista que incluía el propio catéter, entre otras cosas que él tenía que costear ya que su unidad no contaba con dichos insumos desde hace algunos meses ya que son muy escasos y mucha la demanda de los mismos. Juan Pueblo, angustiado, decidió que era muy complicado lo que le pedían, además que en su comunidad no había acceso a los insumos que le habían solicitado, su salario apenas le alcanzaba para poder comprar alimentos para él y su esposa que vivían solos en su domicilio y pasados los meses comenzó a sentir que su paso era más lento, se sentía más cansado de lo habitual y sus parpados se hinchaban además de sus piernas. Fue trasladado una tarde al hospital donde falleció en la sala de urgencias por complicaciones propias de la enfermedad.

 

Las cifras de morbilidad y mortalidad son alarmantes; en México, esta es una de las principales causas de atención en hospitalización y en los servicios de urgencias. Está considerada una enfermedad catastrófica debido al número creciente de casos, por los altos costos de inversión, recursos de infraestructura y humanos limitados, la detección tardía y altas tasas de morbilidad y mortalidad en programas de sustitución. El IMSS es la institución de salud que brinda la mayor cobertura de atención en México y específicamente a pacientes con diálisis. México no cuenta con un registro nacional de datos de pacientes renales que permita conocer con exactitud los datos epidemiológicos de estos pacientes. El incremento del número de pacientes en programas sustitutivos sigue una cuesta lenta y progresiva, lo cual es preocupante ya que en poco tiempo no habrá recursos financieros suficientes para sustentar estas terapias. No existe hasta el momento una política pública que atienda este problema y la planeación a mediano y corto plazo, poco ayuda. Mientras el afectado seguirá siendo: Juan Pueblo.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora