domingo, 29 de abril de 2018

Apego al tratamiento


Durante las últimas décadas se ha resaltado la importancia del apego a los tratamientos, entendiendo esto como la conducta del paciente que coincide con la indicación médica prescrita en relación con la forma y tiempos de administrar los medicamentos, las dietas y los cambios en el estilo de vida. Este fenómeno de falta de apego al tratamiento puede ocurrir en pacientes con padecimientos agudos o crónicos, el problema es más evidente en los tratamientos a largo plazo.

Existe mucha experiencia en este tema en pacientes con tuberculosis, entre las causas del mal apego destacan: desconocimiento de la enfermedad, mala relación con el médico, tiempos de consulta muy pequeños, escolaridad baja, situación económica, intolerancia al medicamento, uso de tratamientos alternativos, etcétera. La falta de apego a los tratamientos repercute en el escaso o nulo control de las enfermedades, lo que favorece la aparición de complicaciones, así como en términos económicos; por ejemplo, se calcula que más de 10% de las hospitalizaciones es por esta causa. Conocer el grado de apego al tratamiento se ha convertido en una necesidad para los servicios de salud en México y en el mundo. En la bibliografía mexicana existe mucha información en cuanto a cumplimiento, apego y prescripción de medicamentos, lo que nos permite inferir acerca de los algoritmos de tratamiento y políticas de salud. La aparición de comorbilidades en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 atendidos en un centro de salud hace que disminuya el apego al tratamiento por diversas causas. El cumplimiento de las indicaciones médicas es fundamental para la recuperación y mantenimiento de la salud del paciente. Esto sucede de manera similar en la población hipertensa y con dislipidemia, por mencionar un ejemplo. La falta de apego a los tratamientos tiene un elevado costo social, económico y laboral, porque se ha observado que los niveles más bajos de apego al tratamiento lo muestran los pacientes con enfermedades crónicas que no generan un riesgo potencial y no producen mayores síntomas; y de alguna manera, estos padecimientos requieren mayores cambios en el estilo de vida (diabetes e hipertensión). La mayor parte de las intervenciones que mejoran el apego al tratamiento consiste en estimular al paciente a tomar parte activa en el cuidado de su salud; si tomamos en cuenta que el factor económico es el principal factor de desapego en nuestra población y al observar un mayor grado de apego en los pacientes hipertensos, podríamos hacer recomendaciones para incrementar el grado de apego: escuchar al paciente; que repita lo que tiene que hacer, redactar indicaciones tan simple como sea posible, generar instrucciones claras acerca del tratamiento exacto, preferentemente por escrito, indicar regímenes que tomen en cuenta la rutina diaria del paciente, insistir en la importancia del apego al tratamiento en cada visita, reconocer en cada consulta los esfuerzos realizados por el paciente para cumplir con el tratamiento e integrar a un familiar cercano al tratamiento.

Hay que recordar la tarea fundamental del médico para contribuir al cambio de conductas del paciente por medio de intervenciones simples en la atención primaria. La mayoría de los usuarios no percibe al ejercicio físico como parte del control terapéutico de su patología. No obstante, se identifica que la realización de ejercicio o actividades físicas presentan beneficios a su salud, como lo es un apropiado control de peso corporal.Gran parte de los pacientes identifica la importancia que presenta la dieta como parte del cuidado en su calidad de vida, sin embargo, no es percibida como uno de los componentes esenciales en el tratamiento de su enfermedad. La dieta se considera como necesaria en la mantención y por sobre todo, en la reducción del peso corporal y las complicaciones; todo esto ocasionalmente se dice fácil pero llevarlo a cabo, es bastante complejo ¿o no?

Dr. César Álvarez Pacheco
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.


domingo, 22 de abril de 2018

La comunicación en situaciones de riesgo.


Desde el origen de su propia existencia, los seres humanos han estado expuestos a riesgos diversos, asociados a catástrofes naturales, accidentes, así como a enfermedades y epidemias sanitarias; sin embargo, a partir de la década de los 60 del siglo XX, con el surgimiento de la energía nuclear y, por consiguiente, de los riesgos que implica el uso de este tipo de energía en términos de seguridad, la sociedad se vio expuesta a nuevos riesgos asociados al desarrollo científico tecnológico alcanzado. Primero Sarampión, después paperas, ahora el tema de Siria ¿qué sigue?

Estos nuevos riesgos transgreden límites territoriales, étnicos y de pertenencia a grupos sociales, y quedan en peligro de igual manera todas las sociedades, independientemente de su ideología y niveles de desarrollo económico, aun cuando ambos factores inciden en los modos de enfrentar tales riesgos. La necesidad de la comunicación de riesgo en salud como una práctica permanente del sistema sanitario para enfrentar situaciones de emergencia pública, donde se destaca la función de las estrategias de comunicación de riesgo, las que a partir de su efectiva implementación contribuirán a elevar la percepción de riesgo en los públicos meta y, por consiguiente, a minimizar los efectos negativos de las emergencias de salud en términos materiales y de vidas humanas. Es decir, los comunicadores tenemos una responsabilidad en cuanto a lo que se informa, los políticos por ejemplo con sus encuestas manipuladas o declaraciones sin sentido para atacar al contrincante y a su vez, manipular precisamente a su electorado. En el tema de salud, es muy similar. Inicialmente la comunicación en situaciones de emergencia y brotes epidémicos fue definido como “un proceso interactivo de intercambio de información y opinión entre personas, grupos e instituciones; suele incluir múltiples mensajes acerca de la naturaleza del riesgo o expresar preocupaciones, opiniones o reacciones acerca de los mensajes sobre el riesgo o de los arreglos legales e institucionales para la gestión del riesgo” ¿Qué hacer en una situación de riesgo? Las actividades que desarrolla la comunicación de riesgo en el marco de seguridad, son necesarias para las diferentes fases de una emergencia con impacto en la salud pública; para lo cual es importante contar con autoridades y profesionales a cargo, debidamente capacitados para tomar decisiones (no hermanos, compadres o facturas de campaña), quienes contribuirán a mantener la confianza de la población en su gestión y en las recomendaciones para controlar rápidamente el episodio. ¿Cómo se manejó el caso de Parotiditis en una institución educativa? ¿Cómo se maneja en el verano los casos de contingencia por calor o por ciclón tropical? ¿Es adecuado?

La confianza constituye el principio esencial de la comunicación ante situaciones de brote epidémico. La comunicación deberá generar, mantener o recobrar la confianza en caso de crisis entre la ciudadanía durante toda la emergencia sanitaria. La confianza garantizará la credibilidad en los mensajes emitidos por las autoridades en turno; Deberá mantenerse sistemáticamente actualizado al público ante los cambios que ocurran. Conocer como el público entiende y percibe un riesgo determinado, sus creencias y prácticas facilita que se tomen las decisiones oportunas y se pueda incidir en los cambios de comportamiento necesarios para proteger la salud. También promoverá el conocimiento y la internalización de los riesgos conocidos y desconocidos, informando oportunamente y sensibilizando al público desde la planificación acerca de las necesidades e inquietudes para proteger su salud; para lo cual se desarrollarán acciones de capacitación y educación orientadas a prevenir y mitigar el riesgo en los diferentes ámbitos sociales como: la familia, la comunidad e instituciones laborales y educativas.

Dr. César Álvarez Pacheco
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.


domingo, 15 de abril de 2018

Hablemos de Paperas


A propósito de “paperas”, vamos a hablar esta semana de ella, para conocer un poco más y despejar dudas; ya que a  pesar de las altas tasas de vacunación con la vacuna triple vírica, la parotiditis epidémica (paperas) continúa siendo una enfermedad endémica en todo el mundo y se sigue observando actualmente en nuestro país, con picos de incidencia cada 2-5 años.

La parotiditis es una infección viral aguda que produce la inflamación de una o más glándulas salivales, fundamentalmente, la parótida que se encuentra a nivel de los “cachetes”. Esta enfermedad es de distribución mundial. En las zonas templadas, el invierno y la primavera son las estaciones de mayor incidencia. En las zonas donde no hay vacunación sistemática, la enfermedad es endémica y ocurren picos epidémicos cada 2 a 5 años. La parotiditis o paperas es una enfermedad prevenible por vacunación que fácilmente puede confundirse con afecciones producidas por diversos virus, desde un cuadro gripal hasta SIDA, tumores malignos o infecciones por lo que el médico debe indagar en interrogatorio así como realizar una adecuada exploración para establecer un diagnóstico y tratamiento adecuado. Por su elevada incidencia, la Organización Mundial de la Salud la ha denominado “parotiditis endémica” y en México está sujeta a vigilancia epidemiológica. El virus se propaga a través de gotitas de saliva transportadas por el aire, objetos contaminados por saliva y posiblemente por la orina. Afecta indistintamente a hombres y mujeres, principalmente durante la infancia; pero también se presenta en adultos. A pesar de las altas tasas de vacunación con la vacuna triple vírica, la parotiditis epidémica (paperas) continúa siendo una enfermedad endémica en todo el mundo y se sigue observando actualmente en nuestro país. El periodo de contagiosidad abarca desde 7 días antes de la inflamación de la parótida hasta 9 días después (con un pico máximo entre 2 días antes y 4 después del comienzo de la enfermedad, que es cuando al paciente se le considera potencialmente contagioso). La mayoría de los casos se concentran entre los 15 y los 34 años de edad (75%), con predominio en varones. Los brotes más recientes han aparecido en poblaciones vacunadas prácticamente en su totalidad, llamando la atención el hecho de que una gran proporción de casos sean personas vacunadas, sin embargo, esto va unido a la cobertura (porcentaje de población vacunada) En nuestro país, respecto a la edad, antes de la era en donde no había vacunación era una enfermedad típicamente infantil, pero, desde la implantación de la vacuna, ha disminuido claramente la incidencia; no obstante, la enfermedad se ha desplazado a edades superiores, con la peculiaridad de que suele ser más grave, y así los brotes que ocurren en nuestro país afectando a adolescentes y adultos jóvenes.

La vacuna triple viral induce inmunidad activa contra el sarampión, la rubéola y la parotiditis, se aplica por vía subcutánea antes del primer año de vida y una segunda dosis a los 15 meses de edad, brinda protección por varios años; pero no para toda la vida, motivo por el cual en la actualidad la parotiditis se presenta en adultos y con cuadros clínicos controlados. Además de la vacunación, la prevención se realiza a través del aislamiento relativo de los pacientes a efecto de evitar el contacto con las gotas de saliva y objetos potencialmente infectados. Los enfermos no deben acudir a centros educativos y lugares de trabajo (y si están hospitalizados, mantener aislamiento respiratorio) hasta pasados 4 días desde el inicio de los síntomas.El personal de salud debe conocer a fondo todo lo referente a los brotes epidémicos de parotiditis que estamos sufriendo en nuestro país, ya sea en epidemiología, clínica, diagnóstico y tratamiento de la parotiditis, como a las medidas preventivas a adoptar ante un brote epidémico, que conlleva estrategias epidemiológicas.

Dr. César Álvarez Pacheco
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.

domingo, 8 de abril de 2018

Gripe aviar


La influenza es una zoonosis de los cerdos, pájaros, caballos y humanos; probablemente existió entre los mamíferos y pájaros desde épocas antiguas, mientras los animales fueron domesticados y las poblaciones humanas crecieron y se concentraron en centros urbanos, la transferencia de influenza desde los animales a los humanos es fácil de imaginar. Cabe recordar que la influenza es una enfermedad estacional que ocurre en los meses invernales, es decir, es la causante de los cuadros gripales en la mayor parte de los casos. En los últimos 300 años han ocurrido 10 pandemias causadas por virus de influenza, con un promedio de una cada 33 años.La enfermedad es temida debido a que un sub tipo puede ser mas agresivo a los comunes y causar muertes.

El subtipo H5N1 emergió por vez primera como una amenaza a la salud pública en 1997 en Hong Kong, 18 personas fueron hospitalizadas, 6 de las cuales fallecieron, la infección fue transmitida de aves a humanos.En el 2006 doce pacientes fueron infectados (8 confirmados por la OMS) en Turquía de los cuales 4 murieron. El virus después migró hacia Rusia y se expandió hacia Europa y varias naciones africanas. Las infecciones humanas por el H5N1 en el 2006 han declinado pero esto podría cambiar. La transmisión animal-humano se ha demostrado en las personas que están expuestas a heces infectadas y a la ingesta de carne contaminada deaves (incluyendo los patos). Otras formas incluyen la ingestión de agua contaminada (puede ser al nadar en agua sucia), o por inoculación directa intranasal o conjuntival, así como la infección por las manos con objetos infectados. El periodo de incubación del H5N1 es mayor que el de los otros tipos de influenza, se han reportado casos en que ocurre a los 2 a 4 días después de la exposición. Reportes recientes indican intervalos de 8 a 10 días. La infección por influenza aviar se caracteriza por una afección comun de cuadro gripal. Los síntomas comienzan después de 2 a 5 días de la exposición, un poco más tarde que los virus de influenza humanos. Una alta tasa de mortalidad se ha visto en pacientes hospitalizados, la mayoría de ellos ha ocurrido en un promedio de 9 a 10 días de diagnosticada la enfermedad y la mayoría de ellos por insuficiencia respiratoria progresiva. El uso de pruebas rápidas para el diagnostico de la gripe aviar A/H5N1 es muy inespecífico para detectar la misma, ya que estas pruebas pueden identificar virus de gripe tipo A y/o B, sin embargo, no se podrá diferenciar entre los subtipos del virus de gripe tipo A humana y aviar. Por lo tanto, las muestras deberán de ser enviadas a un laboratorio de referencia de la OMS u otro laboratorio que esté capacitado para confirmar el diagnóstico.

México informó de dos brotes del virus H7N3 de gripe aviar en el centro del país, de los cuales uno afectó a una granja de pollos, según reportes de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE, por sus antiguas siglas), que citó un reporte de la Secretaría de Salud del país.El virus provocó la muerte de 1,380 aves en una granja en el estado de Guanajuato, que tenía unos 1,900 pollos rojos de Rhode Island y pollos blancos, indicó el reporte de la Secretaría publicado en el sitio web de la OIE, que tiene su sede en París.El otro brote se detectó entre aves de corral en el estado de Querétaro y provocó la muerte de siete animales de un grupo de 26. El riesgo es muy elevado para contraer esta enfermedad y las medidas de contención no se hicieron esperar; lo cierto es que enfermedades que se creían controladas, hoy están siendo causa de noticia nuevamente, esta vez fue la influenza, anteriormente los casos de sarampión, y ahora ¡¿parotiditis?! Pero ese también es otro tema para explicarlo en otra columna.

Dr. César Álvarez Pacheco
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.

domingo, 1 de abril de 2018

Alerta por Sarampión


El sarampión es una virosis humana exantemática, muy contagiosa, y mortífera. Se transmite por gotitas aéreas de saliva procedentes de las secreciones de vías respiratorias que los enfermos generan al estornudar, toser o hablar. Las epidemias incrementan el ausentismo escolar y las defunciones de niños débiles y malnutridos, lo que afecta la economía, la salud y el bienestar de las familias.Una enfermedad casi erradicada gracias a la vacunación, y re emergente ya que la semana pasada se presentaron 4 casos en diversas partes del país la mayoría en CDMX.

Hemos observado también la transmisión violenta y veloz en guarderías específicamente: un solo niño con coriza y conjuntivitis infectó a 64 no vacunados; también en escuelas y hospitales es incluso, sin duda, una de las virosis más contagiosas. La enfermedad natural induce la inmunidad protectora permanente,lo que quiere decir que no volverá a enfermar por la misma causa. La vacunación en estos casos como en otros es realmente importante para no contraer la mortifera enfermedad. La razón principal de los brotes actuales es la baja cobertura de vacunación en personas que sí la requieren. En poblaciones indígenas aisladas (ciertos grupos marginados de urbes grandes y aquéllos resistentes a vacunarse), el virus suele causar estragos, propagándose rápidamente. Aunque suele ser importado de otras regiones por medio de grupos inmigrantes y a través de viajeros o migrantes, el virus sarampionoso viaja y ataca sin aviso previo; por ello, es indispensable reforzar la vigilancia epidemiológica, tarea no sólo de los epidemiólogos, sino de todo el personal de salud. El sarampión ha seguido el patrón epidémico clásico en poblaciones con más de 300,000 habitantes. Los picos epidémicos estacionales se dan en invierno-primavera, cada dos o tres años, con incremento máximo cada 10 a 15 años. El único reservorio es el hombre, la enfermedad es extremadamente transmisible, las epidemias no pueden evitarse cuando la vacunación protectora no es aplicada pronto, con técnica y dosis correctas, es decir: es muy importante. El efecto mortífero y devastador de los brotes se da principalmente entre los lactantes menores malnutridos, o en personas susceptibles con problemas en su sistema inmune o alguna enfermedad crónica como diabetes. El periodo de incubación del sarampión es de siete a 18 días. El periodo de contagiosidad comienza poco antes de los síntomas como tos y fiebre, extendiéndose hasta cinco días de las manchas en la piel.

Con el uso generalizado de la vacunación antisarampionosa, se registró descenso progresivo de la morbilidad, interrumpido por el gran brote de 1990 y por otro repunte menor en 1997; la enfermedad ha persistido en varios países sudamericanos durante el 2000 al 2004. En México se investiga y hace seguimiento de 2,000 casos de enfermedad febril exantemática por año. A pesar de tan arduo trabajo, en el año 2000 se re introdujo el virus por dos importaciones de Europa; hubo 30 casos registrados en cuatro entidades federativas. En 2001 se confirmaron sólo tres casos importados; el primero estuvo expuesto frente a un enfermo asiático de los Estados Unidos. En el 2003 hubo dos epidemias, en abril y la primera semana de julio con 22 casos, la segunda comenzó a fines de julio, ambas ocurrieron en el Estado de México y el Distrito Federal. Estas actividades, aparentemente simples, requieren compromiso político sostenido, la organización y coordinación excelente del Sector Salud, la participación activa de la gente y “acción rápida” para reducir el impacto negativo y devastador de las epidemias.

Dr. César Álvarez Pacheco
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.