domingo, 30 de junio de 2024

Medicina Culinaria.

 


La medicina culinaria es una rama reciente en la Medicina, la cual combina el arte de preparar los alimentos y la medicina basada en la evidencia. Tiene como objetivo dar herramientas a profesionales de la salud y a los pacientes sobre cómo utilizar los alimentos y sus nutrientes en beneficio de la salud. “Somos lo que comemos”, dice la frase de un filósofo.

 

Esta vertiente principalmente está enfocada para la prevención y tratamiento de enfermedades crónicas no transmisibles, particularmente sobre aquéllas asociadas al sobrepeso y obesidad. Por ejemplo, tomando en cuenta los reportes de la Organización Mundial de la Salud, hasta 70% de las primeras 10 causas de muerte a nivel mundial se relacionan con padecimientos cardiovasculares (infarto al miocardio, accidente vascular cerebral, etcétera), los cuales pueden ser prevenibles mediante los cambios en el estilo de vida, tales como evitar el sedentarismo, dormir bien y, por supuesto, llevar a cabo una adecuada alimentación. Desde hace años, múltiples estudios han demostrado que la alimentación saludable puede mejorar el perfil de las poblaciones. Como modelo podemos mencionar el consumo habitual de las dietas mediterráneas, que de manera consistente se ha asociado a disminución de enfermedades cardiovasculares y la mortalidad. Pero, de manera interesante, se ha observado que estos beneficios se presentan en personas con sobrepeso y obesidad, independientemente de si perdieron peso o no. El efecto protector y terapéutico de seguir hábitos saludables también ha sido demostrado en población pediátrica con obesidad. Hay estudios que evalúan intervenciones para tratar de cambiar los estilos de vida, en los cuales se ha concluido que las alteraciones cardiometabólicas de los escolares y adolescentes mejoran significativamente después de 12 meses de estar manteniendo estos cambios. El personal de salud que participamos en la atención de niños y adolescentes debemos hacer esfuerzos para que las familias adopten conductas saludables desde etapas tempranas de la vida, a fin de propiciar un crecimiento armónico de sus hijos. De lograrlo, seguramente observaremos un impacto importante para evitar que desarrollen sobrepeso u obesidad que, en la actualidad, se ha convertido en un problema de salud pública. La medicina culinaria, aunque principalmente está dirigida a los pacientes, también tiene como objetivo al equipo de salud. Los pilares de la medicina culinaria son tratar de que se vuelva a cocinar en casa, con el propósito de disminuir o evitar el consumo de productos ultraprocesados. Además, se instruye sobre métodos de cocción saludables, capacitando en formas diferentes de incorporar vegetales, frutas, legumbres, cereales integrales, semillas y especias. Asimismo, quienes practican esta disciplina aprenden a preparar los alimentos de manera rápida, sencilla, sabrosa y entretenida; esto último, de alguna forma puede también ayudar a la convivencia familiar. El surgimiento y desarrollo de esta disciplina fueron necesarios porque generalmente los médicos no sabemos cómo preparar alimentos saludables, apetecibles, variados y sencillos, en especial para los niños. Normalmente, lo que realizamos en el consultorio es recomendar “seguir una dieta saludable”, en ocasiones utilizando herramientas como el plato del buen comer. Sin embargo, es muy probable que pocos tengan conocimientos sólidos y, por lo tanto, les resulta difícil comunicar a los padres las formas para realizarlo.

 

El problema actual del sobrepeso y obesidad, tanto en población pediátrica como adulta, requiere enfrentarlo con intervenciones a diferentes niveles. A nivel de los profesionales de la salud, lo primero sería mejorar sus competencias para garantizar que otorguen recomendaciones basadas en evidencia, para que sus pacientes y familias sigan una vida saludable. En este punto, la educación en medicina culinaria proporciona elementos para mejorar sus habilidades al momento de abordar aspectos de nutrición. Pero, además, los capacita para optimizar su propia salud al adoptar los principios de la medicina culinaria. A fin de ejemplificar cómo la medicina culinaria puede ayudar a preparar alimentos saludables. Cuando utilizamos alimentos procesados, sólo se requiere el cocinarlos en la freidora de aire, o freírlos en un sartén; sin embargo, no es una alimentación variada ni proporcional. Mientras que, en el platillo de albóndigas, se utilizaron diferentes alimentos con una cantidad importante de verduras, leguminosas y una cucharada de aceite de oliva. Con este platillo cumplimos con los principios de que la alimentación debe ser variada, suficiente, proporcionada y sin consumo de alimentos ultraprocesados. Difícil en nuestros tiempos pero no imposible. Adoptar costumbres más saludables y alimentarnos mejor, es el reto.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

domingo, 23 de junio de 2024

¿Aburrido?

 


En los jóvenes el aburrimiento puede estimular el desarrollo cognitivo, es el impulso para empezar a usar habilidades motrices e imaginar situaciones, para conocer el entorno y desarrollar la creatividad.

 

El tiempo sin estructurar es clave para mejorar habilidades relacionadas con el juego, como la imaginación y el simbolismo. Nos permite imaginar un mundo sin límites, un mundo donde los dragones existen y vuelan. En 1928 se estrenó el primer cortometraje de Mickey Mouse. Había nacido a principios de año, durante un viaje de una semana en tren desde Nueva York hasta Los Ángeles. Walt Disney estaba regresando, junto a su esposa, de una reunión de negocios en donde había perdido los derechos de su caricatura; Oswald el conejo afortunado. Durante el largo y aburrido regreso Disney ocupó su tiempo de viaje reflexionando e ideando un ratoncito de pantaloncillos rojos, a quien llamó “Mortimer”; pero la Sra. Disney sugirió que Mickey era mejor nombre. Una estrella había nacido. ¿Qué hubiera ocurrido si Walt Disney hubiera viajado en avión?, si el tiempo para reflexionar, platicar y analizar con su esposa el nombre del ratón y las posibilidades para salir adelante hubieran estado interrumpidos por el teléfono, la película del tren, ¿el videojuego y la laptop? Muy probablemente nada y nosotros no conoceríamos a Mickey, Pluto, Goofy o Donald, y Orlando sería una ciudad naranjera. William Stukeley, un amigo de Issac Newton, escribió en 1752, el libro: La vida de sir Isaac Newton, y relató cómo nació la ley de la gravedad: “Estábamos sentados bajo la sombra de los manzanos del jardín de su casa y me dijo que había estado en esta misma situación cuando la noción de la gravedad le asaltó la mente. Fue algo ocasionado por la caída de una manzana mientras estaba sentado en actitud contemplativa. ¿Por qué esa manzana siempre desciende perpendicularmente hasta el suelo?, se preguntó a sí mismo”. ¿Y si Newton hubiera estado viendo su celular, checando Facebook o Instagram? ¿Habríamos podido llegar a la Luna? Actualmente el tiempo de ocio, tiempo usado durante milenios para la reflexión y el análisis se encuentra en grave peligro, es mal visto “no hacer nada”, debemos siempre entretenernos en algo y existe toda una industria para lograrlo. Durante muchos años los seres humanos hemos creado múltiples mecanismos para guardar información, las pinturas rupestres, las tablillas egipcias y los libros, hemos mejorado las formas de almacenamiento pasando por la imprenta y llegando a los discos de computadora y a los grandes servidores en la nube, finalmente todos almacenan información. Actualmente, la aparición de la inteligencia artificial por primera vez en la historia desarrolla una capacidad analítica similar al esquema de pensamiento humano, siempre tuvimos memoria en disco, ahora hemos creado inteligencia. En los últimos 90 años, la aparición de la radio, el cine, la televisión, los juegos electrónicos, las computadoras y el internet han desarrollado una oferta muy amplia de entretenimiento para todos los seres humanos. Este proceso se lleva a cabo en casa, en medios de transporte y aun caminando, se ha desarrollado una cultura de entretenimiento en la cual todo el proceso de pasar el tiempo tiene un origen exterior. El aburrimiento aumenta la tolerancia a la frustración, la reflexión y desarrolla la imaginación; sin él, no podemos desarrollar algunas capacidades cognitivas y emocionales. Hoy en día los jóvenes no conciben pasar un rato sin su teléfono o sin su laptop, revisando redes sociales diversas con información (en su mayoría) solo de “relleno” o no justificada, y el adolescente estudiante muchas veces cree que con eso es suficiente para aprender; y no precisamente es el aprendizaje que se desea.

 

Con la aparición de la inteligencia artificial es imprescindible que nuestros jóvenes en formación desarrollen capacidad de soñar, imaginar y poder crear mecanismos de pensamiento que les permitan desarrollarse en un ambiente donde existirán muchas oportunidades, pero también muchos retos. El lograr que nuestros jóvenes adquieran la capacidad de aburrirse y soñar para buscar soluciones tal vez sea la mejor opción para ayudarles a enfrentar el futuro.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

domingo, 16 de junio de 2024

El “oso” de la OMS

 


La certificación de las causas de muerte es uno de los procederes más antiguos que existen en la práctica médica. Una correcta certificación reviste una gran importancia, pues a partir de su análisis se derivan acciones desde regionales hasta internacionales, para a través de programas de salud, elevar la calidad de vida de la población. Eso lo registra la OMS, por lo que debe ser información fidedigna ¿cierto?

 

Las estadísticas de mortalidad inciden en la gestión y toma de decisiones, pues los indicadores elaborados a partir de ella resultan contundentes indicativos del progreso social, económico y de salud de una nación. Su calidad depende del correcto llenado del certificado médico de defunción fundamentalmente. Estudios nacionales refieren cómo en el área de las estadísticas de mortalidad existe una gran preocupación por la calidad de la información. De igual manera, la validación de los datos registrados y procesados, así como una intervención más activa de las unidades verificadoras en pos de corregir los problemas a nivel de la base tenga una mayor calidad de la información estadística de mortalidad de manera frecuente. Lo anterior mencionado viene a que en días pasados un hombre infectado con la gripe aviar H5N2, en México que fue el primer caso en humanos confirmado de esta cepa del virus, y que murió por causas multifactoriales, fue notificado por la propia OMSS  nivel mundial que la causa de la muerte fue precisamente el virus mencionado; ¿Qué implica esto después de una pandemia? Exacto, terrorismo. La OMS anunció el miércoles pasado que se detectó el primer caso de infección en humanos por la gripe aviar H5N2, en un paciente en la Ciudad de México que murió el 24 de abril. El paciente presentó los primeros síntomas el 17 de abril y fue hospitalizado el 24 del mismo mes en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias “Ismael Cosio Villegas” (INER); falleció ese mismo día debido a complicaciones de su enfermedad. La persona tenía múltiples condiciones médicas preexistentes y había estado en cama durante tres semanas por otras razones antes de que aparecieran los síntomas. Los médicos le efectuaron varias pruebas y detectaron que el paciente estaba infectado con la gripe aviar H5N2. La OMS informó el miércoles que se desconoce la fuente de la infección, pero en marzo se detectó un foco de gripe H5N2 en una granja avícola en Michoacán. Además se confirmaron otros casos en aves de corral en Texcoco y en abril en Temascalapa, municipios del Estado de México. La OMS declaró a nivel internacional que el paciente había fallecido por esta causa, el ismo miercoles. La OMS con base a la información de las autoridades mexicanas de salud, que el paciente comenzó a sufrir síntomas agudos incluyendo fiebre, dificultad respiratoria, diarrea, náuseas y malestar el 17 de abril y que murió el 24 de ese mes. Por su parte la Secretaría de Salud precisó que la persona cuya muerte en México fue reportada como la primera causada por la gripe aviar AH5N2 en el mundo no falleció en realidad por el virus, sino por "padecimientos crónicos". Para esto, el secretario de Salud, Jorge Alcocer, cuestionó en la conferencia mañanera del jueves siguiente, un comunicado de la OMS del miércoles, en que se afirmaba que el caso fue la primera infección humana registrada y también la primera muerte. Un equipo de personas expertas del sector Salud dictaminó que la persona identificada con influenza A (H5N2) no murió a causa de este virus, sino como consecuencia de padecimientos crónicos que generaron un choque séptico, dijo la Secretaría de Salud en un comunicado. Las autoridades de salud de México precisaron que la causa de la muerte del paciente está siendo investigada, pero destacaron que el hombre de 59 años, que era diabético, presentó una falla renal y después de unas horas, una falla respiratoria. Al día siguiente la OMS se retractó.

 

Fue una muerte debida a un conjunto de factores, no atribuible al virus H5N2, declaró Christian Lindmeier, portavoz de la OMS, en una rueda de prensa en Ginebra. La persona fallecida, detalla el documento, fue un hombre de 59 años, residente en el Estado de México y que padecía una enfermedad renal crónica, diabetes tipo dos e hipertensión arterial sistémica desde hacía más de 14 años. ¿Funcionó el pronunciamiento que hizo México? ¡Claro! El manejo de información debe ser más exacto y verificado para no generar controversia sobre todo posterior a una pandemia de infección respiratoria viral. La infodemia también enferma y se propaga rápidamente, ojalá sirva de experiencia para futuros casos.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

 

 

 

 

 

domingo, 9 de junio de 2024

Cuando el medicamento ya no hace efecto.

 


Escuché la semana pasada comentar a un personal de salud: “Es que el medicamento no le hace efecto”, y aunque mucho esconde la frase, la realidad es que el paciente no llevaba una buena adherencia al tratamiento, es decir; no lo tomaba, o lo tomaba “solo cuando se sentía mal” obviamente el paciente ingreso con una complicación temprana, derivado de esta “mala costumbre”.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define “adherencia terapéutica” como “el grado en que el comportamiento de una persona, tomar el medicamento, seguir un régimen alimentario y ejecutar cambios del modo de vida, se corresponde con las recomendaciones acordadas de un prestador de asistencia sanitaria”. Para hacer referencia a la puesta en práctica o a la ejecución de las recomendaciones de salud y/o terapéuticas se han utilizado indistintamente los términos “cumplimiento” y “adherencia”. Hablar de cumplimiento refleja una conducta meramente pasiva (por parte del paciente) o activa (por parte del médico y/o personal sanitario), dando así importancia o “culpando” sólo a una de las dos partes. Por otro lado, la adherencia terapéutica implica una diversidad de conductas, siendo considerada como un fenómeno múltiple y complejo y refiriéndose al grado en el que el comportamiento del paciente coincide con las recomendaciones acordadas entre el profesional sanitario y el paciente. Por lo tanto, este término engloba responsabilidad de las “dos partes” (paciente y médico), donde resalta tanto la participación activa del paciente como la responsabilidad del médico para crear una adecuada comunicación que facilite la toma de decisiones compartidas. La falta de adhesión del paciente a los medicamentos recetados plantea un reto importante a la comunidad global de la salud, por lo que se ha convertido en un tema de gran interés y objeto de gran cantidad de estudios; es por ello que, desde hace varias décadas, se han llevado a cabo múltiples investigaciones e intervenciones, algunas de manera intensiva, para mejorar la adherencia a los medicamentos, las cuales sólo han mostrado resultados modestos y apenas concluyentes. Una posible explicación a esto es que la falta de adherencia es multifactorial; incluso Haynes (1976) identificó más de 200 variables relacionadas con la adherencia, por lo que una intervención exitosa, en la cual se logre abarcar cada uno de los factores causantes, resulta sumamente complicada y se ha convertido en un verdadero reto en materia de salud pública, a pesar de los esfuerzos significativos realizados por reconocidos investigadores en la materia. La falta de adherencia terapéutica es la herramienta que se utiliza para cuantificar la magnitud con la que el paciente sigue o no las instrucciones médicas, lo cual implica la falta de aceptación de un diagnóstico y su incidencia en el pronóstico; cuando el seguimiento de las instrucciones es negativo, el pronóstico empeora y los resultados pueden ser desfavorables. Gracias a los avances en el campo de la medicina en los últimos años, se han logrado crear medicamentos altamente efectivos y de fácil administración para atacar las enfermedades con mayor prevalencia y las que presentan un mayor índice de morbimortalidad como es la hipertensión; de forma paradójica, estos avances en herramientas diagnósticas y a nivel farmacológico han logrado controlar las cifras de presión arterial en los pacientes hipertensos, pero no han logrado reducir exitosamente la morbimortalidad cardiovascular, siendo la baja adherencia y/o la falta de persistencia al tratamiento prescrito uno de los principales factores que contribuyen a la falta de control de la enfermedad.

 

Las enfermedades crónico-degenerativas van en aumento y en algunos países han logrado superar incluso la prevalencia de las enfermedades infecciosas. A este cambio en la prevalencia mundial de las enfermedades se ha denominado transición epidemiológica. De este modo, las enfermedades cardiovasculares ocupan el primer lugar de morbimortalidad en más del 75% de los países a nivel mundial y son la principal causa de muerte en América Latina. Son muchos los factores relacionados con el tratamiento que influyen sobre la adherencia; los más relevantes se vinculan con la complejidad del régimen médico, la duración del tratamiento, los fracasos terapéuticos anteriores, los cambios constantes en el tratamiento, los efectos adversos y la disponibilidad de apoyo médico para tratarlos. “Los medicamentos no funcionan en los pacientes que no se los administran”, frase atribuida al Doctor Charles Everett Koop (1916-2013), reconocido cirujano pediatra estadounidense y experto en salud pública. Cuando sienta que su medicamento no hace efecto: Consulte a su médico.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

domingo, 2 de junio de 2024

Por la anécdota.

 


Poco después de su creación, nadie entendía que tipo de programa era, o si tenía algún beneficio tangible. Nadie quería estar afiliado por que no significaba un apoyo económico, vamos, estaban tan acostumbrados a los programas sociales, que lo que menos les importaba en aquel entonces, era precisamente su salud.

 

En abril del 2003 se aprueba una reforma a la Ley General de Salud que dio origen al Sistema de Protección Social en Salud, diseñado en aquel entonces por un grupo de médicos encabezados por Julio Frenk precisamente con sentido social para otorgar una atención médica ara todos aquellos que no cuentan con alguna afiliación, es decir: “la población abierta”. Un esquema asistencial en donde primero se estudió la evolución de la población 40 años atrás, para poder observar la visión con sentido social a futuro. Un esquema para todos aquellos que no eran asalariados, como la gran mayoría de los productores del campo, ejidatarios, comuneros, pequeños propietarios, los trabajadores por cuenta propia del campo y la ciudad, plomeros, electricistas, etc., los pequeños comerciantes, los profesionistas en el ejercicio libre de su profesión, todos los que cobran por honorarios o comisión, las personas que están fuera del mercado de trabajo, amas de casa, estudiantes, personas con alguna discapacidad permanente y los que, estando en el mercado de trabajo, no consiguen empleo: en total, la mitad de la población sin seguridad social en aquel entonces. Así nacía el Seguro Popular. A su inicio, se tenía que afiliar a la población, es decir, nutrir un padrón de beneficiarios para llevar a cabo un control y registro de datos básicos, para otorgar una cobertura en una red de hospitales en donde se prestaba la atención, la red de hospitales eran capacidad instalada, responsabilidad de cada estado, es decir, no tengo las mismas enfermedades en Chiapas, que en Chihuahua; ni la misma cantidad de pacientes en Jalisco, que en Colima. Entonces necesitaban individualizar el gasto conforme a presupuesto de base cero, para otorgar una equidad con relación a presupuestos y necesidades de cada entidad federativa. Al principio no se le ponía mucha atención por parte de la población hasta que comenzaron a ver los beneficios; iniciaron con un paquete básico de cobertura de 52 atenciones, atención primaria como consultas de medicina general y programas básicos de cobertura de vacunación, entre otros, además atención hospitalaria y cirugías complejas. Después agregaron un apartado de gastos catastróficos, donde garantizaba la atención a los 10 tipos de cáncer mas frecuentes en el país. La población comenzó a notar el beneficio y a disminuir el gasto de bolsillo; los estados empezaron a recibir recursos por atenciones otorgadas y comenzaron a aumentar la plantilla de los hospitales y a construir otros nuevos. Llegó el otro sexenio y se quedó con lo que parecía prometedor, agrego un apartado que se llamó: Seguro Médico Siglo XXI, y le apostó con todo a la infancia; la obertura creció a más de 250 acciones y la cobertura de gastos catastróficos de amplió a otras enfermedades como las denominadas, como “raras”, con un presupuesto de más de 40 mil millones de pesos. Comenzaron a construir hospitales de segundo y tercer nivel y se equiparon los que ya estaban. El seguro Popular fue reconocido a nivel de la OMS por su sentido social. Llegó un nuevo sexenio, pero ahora con un partido distinto, y estos no dudaron en mantenerlo, adoptarlo y enriquecerlo; cualquiera hubiese pensado que sería un error quitarlo y comenzar de cero, era ya mucho lo ganado y parecía ser un esquema “casi” completo pero sustentable financieramente hablando. Había cada vez más controles para el manejo de recursos debido a que algunos estados comenzaron hacer mal uso de los mismos y no destinarlo a donde verdaderamente iba, a la salud de su población. Se diseñaron estrategias para que no sucediera y se amarro las manos a algunos gobernadores, con todo y esto, buscaban no dañar a la población ni al beneficio del programa de lo que hoy, solo queda la anécdota.

 

A la llegada del gobierno en turno sin discutirse en la cámara, se presentó una reforma que se aprobó y el 29 de noviembre de 2019, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el decreto que daba a una nueva política pública que sustituiría al Seguro Popular y entró en vigor el 1 de enero de 2020. El resultado usted ya lo sabe y quizá ya lo padeció. ¿Hacia dónde vamos? Seguro Popular se construyó durante 16 años, ¿Cuánto tardará el nuevo esquema? ¿Hay que voltear al pasado para observar el futuro? Cuando menos, para recordarlo.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora