domingo, 30 de julio de 2023

¿ISSSTE del Bienestar?

 


El tema de salud sin duda, siempre nos da de que hablar. Desde el desabasto de medicamentos hasta la construcción ultra lenta de algunos hospitales e incluso problemas en los  mismos como el caso de un elevador. Un tema bastante complejo y aún pendiente en la agenda de gobierno.

 

El acceso a la salud también incluye medicamentos de calidad, seguros, eficaces y asequibles, a la vez que se asegura que el uso de esos servicios no expone a los usuarios a dificultades financieras, en particular a los grupos en situación de vulnerabilidad. Para ello se requiere la definición e implementación de políticas y acciones con un enfoque multisectorial para abordar los determinantes sociales de la salud y fomentar el compromiso de toda la sociedad para promover la salud y el bienestar. El seguro de salud del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) reportó un déficit de 9 mil 321 millones de pesos en 2022. Para cubrir las necesidades en este rubro, este año hará uso de su reserva financiera, pero se agotará en los siguientes cinco. Es decir, a partir de 2029 necesitará de recursos adicionales para continuar con la prestación de servicios médicos, de acuerdo al Informe Financiero y Actuarial 2023. El estudio señala que el mayor peso económico proviene de los pensionados por una alta prevalencia de enfermedades crónicas, principalmente diabetes, hipertensión arterial y cáncer. Los ingresos actuales apenas alcanzan para cubrir una tercera parte de los gastos de la atención de estos males. Cabe señalar que en 20 años se duplicó el número de pensionados. De representar 4% del total de derechohabientes en 2002, pasó a 10% en 2022 y seguirá en aumento, según cálculos del informe. Mientras, los trabajadores activos, que realizan las mayores aportaciones al seguro de salud, se mantuvieron constantes en el mismo lapso, en un promedio de 23% del total de derechohabientes del ISSSTE. El resto, 67% son los familiares de los asegurados activos y pensionados. En total, son beneficiarios del instituto 13 millones 732 mil 327 personas, de las cuales 3 millones 158 mil 54 son trabajadores activos y un millón 312 mil 775 son pensionados. Otro factor que incide en la situación financiera del instituto es la menor proporción de trabajadores adultos jóvenes (de 20 a 29 años de edad). A nivel nacional, este grupo representa 16.5% de los habitantes, mientras entre los asegurados del instituto son menos de 4%. Es decir, el ISSSTE es una población de adultos mayores. El seguro de salud se financia a través de las cuotas y aportaciones, que equivalen a 11.47 por ciento del sueldo básico de los trabajadores, más la cuota social a cargo del gobierno federal. En 2022, el seguro de salud tuvo ingresos por 78 mil 398 millones de pesos y los gastos fueron 87 mil 719 millones de pesos. Así, el resultado de operación fue un saldo negativo de 9 mil 321 millones de pesos. El organismo, que en octubre cumplirá 64 años de existencia se encuentra planeando ya una estrategia de “supervivencia” y la verdad es que le urge ya un tratamiento paliativo, ya que su destino no es muy favorable dadas las condiciones precarias de sus unidades, el aumento de enfermedades crónicas y sus complicaciones que cuestan muchísimo tratarlas o dedicarse a un modelo biomédico curativo y no preventivo, y el tema de pensiones que tienen al organismo en decadencia, un rezago de inversión en infraestructura y equipo médico, lo que ha generado la dependencia de servicios subrogados y tercerización de los mismos.

 

Para empezar, el envejecimiento de la población no es un argumento válido para sostener que las pensiones no alcanzan, porque así como aumenta el número de personas de la tercera edad, también aumenta el número de jóvenes en edad de trabajar. De hecho, la natalidad mexicana está en la media mundial, entonces ¿qué está pasando? Una respuesta es la precariedad laboral, es decir, el problema es que no haya jóvenes, sino que los trabajos que se crean son precarios, por lo mismo no tienen derechos laborales como la seguridad social, por ende, el número de aportaciones nunca puede aumentar porque a los jóvenes no se les inscribe en el Instituto. ¿Qué sucederá? ¿Una fusión con IMSS, quizá? ¿ISSSTE Bienestar? No sería sorpresa escuchar alguno de estos temas en los próximos meses o futuro no muy lejano para subsanar el tema económico que tiene agonizando a la institución y su seguridad social para con los trabajadores.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

 

 

 

 

domingo, 23 de julio de 2023

Un gasto Catastrófico.

 


La falta de cobertura de los servicios de salud, particularmente en el grupo de trabajadores informales y en los más pobres, en combinación con el alto nivel de financiamiento del sistema a través de gastos de bolsillo de los hogares, dio pie a una reforma del sistema de salud que entraría en marcha en enero de 2004. Con esto se buscaría evitar el gasto de bolsillo, para la atención de pacientes con enfermedades que no se pueden costear tan fácilmente como el cáncer.

 

El objetivo de la reforma en mención, fue proveer de protección financiera a aquellos grupos poblacionales, los no asalariados, autoempleados y la población más pobre, que hasta antes de la reforma carecían de cualquier tipo de cobertura en salud que los protegiera financieramente de los riesgos de sufrir de gastos catastróficos y empobrecedores debido a su búsqueda de atención. Por otro lado, se diseñó una estrategia de apuntalamiento de la oferta de servicios para poder satisfacer la demanda esperada, y una cruzada por la mejora en la calidad de los servicios de salud otorgados. El Seguro Popular, un seguro de salud público, buscó dar prioridad a los hogares de más bajos ingresos, principalmente en áreas rurales, y que en su gran mayoría son conducidos por mujeres y se diseñó un esquema de financiamiento en la Ley General de Salud llamado: “enfermedades por gastos catastróficos”. Cuando en 2004 entró en operación el Seguro Popular, se introdujo la figura de las enfermedades que provocaban gastos catastróficos. En aquel momento, la finalidad era terminar con un problema que afectaba a las familias que, a causa de padecimientos como el cáncer, cuidados intensivos neonatales y los infartos al corazón, entre otros, perdían todo su patrimonio para poder pagar los tratamientos. Se suponía que de manera progresiva la lista de padecimientos aumentaría, a fin de terminar con las barreras financieras que impedían el acceso a la atención médica y lograr la universalización de la salud. Ese esquema de afiliación, sustituido en enero de 2020 por el Instituto de salud para el Bienestar (Insabi) y éste a su vez por IMSS Bienestar (2023), se financiaba con recursos aportados por las entidades federativas con la supuesta intención de que, eventualmente, la cobertura sería total. Un esquema con visión, estructurado para que garantizara la atención con posibilidades de crecer y tratar otras como Lupus, Esclerosis múltiple, incluso pacientes con Insuficiencia Renal. No se pudo llevar a cabo. Después de 19 años de vigencia, se eliminó de la Ley General de Salud el concepto de enfermedades de gastos catastróficos y, por lo tanto, la lista que aseguraba la cobertura de tratamientos de algunos de estos males para personas sin seguridad social. Cuando se creó, el Consejo de Salubridad General, aprobó 66 intervenciones, aunque varias estaban acotadas a la edad de los pacientes. Quienes presentaban un infarto al miocardio recibían la atención médica gratuita si tenían menos de 60 años, los enfermos de hemofilia estaban cubiertos hasta los 10 años, mientras el tratamiento curativo de hepatitis C estaba autorizado para personas de entre 20 y 50 años.

 

En Enero del 2020 al surgir INSABI, el “Fondo de Protección para Gastos Catastróficos” cambia de nombre a “Fondo de Salud para el Bienestar” (Fonsabi). Para el 2021, un año después de su creación, tuvo una reducción del ¡44%! pasando de 113,000 millones de pesos en el 2019 a 64,000 millones en el segundo trimestre del 2021. Pero los pacientes oncológicos, no estaban recibiendo su tratamiento en totalidad. Ahora, con la reforma a la ley que entró en vigor el 30 de mayo de 2023, se eliminó la categorización de gasto catastrófico, por lo que el Consejo de Salubridad General, dejó de tener la facultad de definir cuáles tratamientos se pagan o no. Lo mismo ocurre con las enfermedades raras. A partir de 2017, el Consejo, decidía sobre si estos males se consideraban como gasto catastrófico. Se reconocieron 23, pero existen más de 5 mil y, al no ser considerados, tampoco se promovía la investigación, la posibilidad del diagnóstico clínico y menos aún, el acceso a las medicinas. Se fue Seguro Popular, Deshicieron Normas Oficiales que garantizaban la atención legal de ciertos padecimientos, ahora desaparece el Fondo y la categorización considerado como Gastos Catastróficos y con ello, garantizar la atención a todas estas enfermedades que atentan muchas veces con el bolsillo de la población más vulnerable. ¿Qué hacer? ¿Comprar seguros de atención médica privada? Probablemente la mejor opción para algunos, pero ¿y para otros?

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

domingo, 16 de julio de 2023

La grave emergencia en Perú.

 


En días pasados, el gobierno peruano emitió una alerta epidemiológica por el incremento de casos en varias regiones del país en las últimas semanas por el Síndrome de Guillain Barré, una enfermedad autoinmune asociada a infecciones previas. Esta enfermedad es una compleja enfermedad que puede causar la muerte.

 

Según el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades, adscrito al ministerio de Salud, se han reportado varios casos con esta enfermedad en lo que va de este 2023. Lima, La Libertad, Piura, Cajamarca, Junín, Cusco y Callao son las ciudades más afectadas. Desde enero hasta el 7 de julio último se han detectado 182 casos afectados con este síndrome. El presente brote mostró cierto patrón de estacionalidad en relación con el ocurrido en 2018 en la zona norte del país, por lo que la identificación temprana para un tratamiento adecuado puede mejorar los síntomas y acortar su duración (más de 90% de los pacientes puede recuperarse completamente en un año después de la aparición de la enfermedad) El Centro Nacional de Epidemiología emitió la alerta epidemiológica sanitaria, la cual define el caso sospechoso y confirmado según los criterios de Brighton para la notificación diaria en los establecimientos de salud. A través de un decreto supremo, el Gobierno declaró en estado de emergencia sanitaria a nivel nacional debido al aumento de casos del Síndrome de Guillain Barré. Esta medida entró en vigencia desde el día 08 de julio, y tendrá una duración de 90 días naturales. La Resolución suprema N°019-2023-SA fue publicada en el boletín de Normas Legales en el Diario Oficial El Peruano, donde indica que el Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud son responsables de llevar a cabo de manera inmediata las acciones detalladas en el Plan de Acción denominado “Emergencia Sanitaria por Incremento Inusual de Casos de Síndrome de Guillain Barré a Nivel Nacional”. El plan de acción por parte de las entidades pertinentes, incluye actividades relacionadas con la vigilancia epidemiológica, investigación y control del incremento de casos, abastecimiento de productos farmacéuticos, atención de pacientes en servicios de salud, comunicaciones y monitoreo y evaluación. En lo que va del año, 18 departamentos de 24 y una Provincia Constitucional presentaron al menos un caso, haciendo un total de 182 casos reportados y 4 fallecidos. Este incremento inusual de casos en los departamentos o jurisdicciones, fue el motivo por el cual se dio la Alerta Epidemiológica - CDC- Nº 015– 2023.Posterior a los 90 días, se reevaluará la situación del país nuevamente. El síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad autoinmune, que tiene tratamiento y no es contagiosa como el COVID-19 o el virus sincitial respiratorio. Finalmente, el síndrome de Guillain-Barré (SGB) es una enfermedad autoinmune, que incluye un grupo de neuropatías periféricas agudas que se caracterizan por presentar debilidad progresiva y disminución o ausencia de reflejos. La causa de la enfermedad aún siguen siendo desconocidas, pero se conoce que este Síndrome es un proceso mediado por el sistema inmune, que conducen a desmielinización, daño axonal o ambos, afectando las raíces nerviosas, es una afección que puede ocurrir como resultado de una infección aguda causada por bacterias o virus. Sus síntomas iniciales se caracterizan por debilidad y sensación de hormigueo en los pies y las piernas, que luego pueden extenderse a otras partes del cuerpo, como la parte superior. En situaciones más graves, puede llegar a causar parálisis.

 

Perú por su variedad y compleja geografía, es considerado como uno de los diez países con mayor vulnerabilidad, ello significa que debido a la rustica geografía de ese país, existen malas vías de acceso a la que se suma la grave carencia de desagüe y agua potable de millones de habitantes, hospitales y centros de salud antiguos y mal implementados, y cuando suceden fenómenos climáticos graves cada vez más frecuentes como los del fenómeno de El Niño, permiten la emergencia y reemergencia de diversas enfermedades antiguas y nuevas como el dengue, malaria, enfermedad de Carrión, Zika, chikunguña, peste, rabia silvestre, fiebre amarilla, etc. Por ello, las políticas de Estado deben considerar un enfoque integral para enfrentar con creatividad los males endémicos y las inequidades en salud, no solo es dotar de recursos económicos, sino entender que la vulnerabilidad es un hecho grave a tener en cuenta. ¿Tendremos zonas vulnerables en uestro país? ¿Tendremos en nuestro estado?

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

 

 

 

domingo, 9 de julio de 2023

La toma del Consejo de Salubridad.

 


El Consejo de Salubridad General es un órgano constitucional creado para actuar como autoridad sanitaria en toda la República, que tiene como facultad el poder emitir disposiciones obligatorias de carácter general, sin intervención de ninguna autoridad administrativa, con el objetivo de mejorar la salud de los mexicanos.

 

El Consejo de Salubridad General, además debe contar con una independencia presupuestaria suficiente para garantizar la eficacia en su actuación. Debe tener las herramientas normativas necesarias para que las disposiciones generales que emita incidan en las políticas en materia de salud implementadas por el Estado, pues de lo contrario se le relegaría a desempeñar un mero papel consultivo y de dependencia de una Secretaría de Estado. Es un órgano colegiado que depende directamente del Presidente de la República y tiene el carácter de autoridad sanitaria, con funciones normativas, consultivas y ejecutivas. Dentro de las facultades principales del Consejo de Salubridad General, se encuentran las siguientes: Aprobar los acuerdos necesarios y demás disposiciones generales de observancia obligatoria en el país en materia de salubridad general; Aprobar y publicar en el Diario Oficial de la Federación, la declaratoria en los casos de enfermedades graves que sean causa de emergencia o atenten contra la seguridad nacional; Opinar sobre programas y proyectos de investigación científica y de formación de recursos humanos para la salud; Participar, en el ámbito de su competencia, en la consolidación y funcionamiento del Sistema de Salud; Rendir opiniones y formular sugerencias al Ejecutivo Federal tendientes al mejoramiento de la eficiencia del Sistema de Salud, y; Emitir medidas necesarias para combatir enfermedades transmisibles (por ejemplo, virus Covid-19). Por otra parte, podemos destacar que el Consejo de Salubridad General, cuenta con las facultades constitucionales para emitir disposiciones generales con el fin de salvaguardar la salud de los mexicanos. Ello, sin verse limitado por lo establecido en la base cuarta de la fracción XVI del artículo 73 constitucional (campañas contra el alcoholismo y venta de sustancias que envenenan al individuo o degeneran la especie humana, así como las adoptadas para prevenir y combatir la contaminación ambiental, pues dichas disposiciones únicamente enuncian las materias en las cuales existirá un control ex post) ni por las disposiciones legales emitidas por el legislador ordinario con la intención de reglamentar su actuación. Hasta el día de hoy. Si estimado lector, hasta la llegada de la 4T que ha venido a reformar y casi “desaparecer” (también) el Consejo en mención, modificado la última vez en 1917. A lo largo de los casi 100 años de existencia del Consejo de Salubridad, se ha establecido a la par con el mismo nivel jerárquico que la Secretaría de Salud. A pesar de que cuenta con las facultades constitucionales para incidir en diferentes ámbitos que estén relacionados con la salud pública de nuestro país, los cuales han sido limitados hasta cierto punto por la legislación federal. Por ello, el actuar del Consejo ha sido reducido por su reglamentación y en muchos casos no se han explotado las facultades que le otorga el texto constitucional. Por lo que estamos de acuerdo que el Consejo es una autoridad multidisciplinaria; ¿o no?

 

Recientemente el gobierno federal ha sorprendido al eliminar de su seno a instituciones (docentes, investigadores y científicos incluidos en ellas) como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) entre otras ¡diecinueve! más. Y ello, ¿con qué objetivo? Para quedarse el organismo a cargo de “todo”, incluidos los titulares de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Secretaría de Marina. ¿Cómo llegó el gobierno federal a centralizar todos los poderes extraordinarios? Esto le llevó tan solo ¡cuatro días! y sin cambiar la Constitución, mediante una aprobación fast track. También se emitió el pasado 22 de junio el “Acuerdo por el que se establece la obligatoriedad de la implementación del Modelo Único de Evaluación de la Calidad (MUEC), y fue publicado en el DOF el 29 de junio. Con ello abrogaron el anterior esquema de “Certificación de Establecimientos de Atención Médica” que operaba desde 2008, para dar paso al MUEC como nuevo mecanismo para la Certificación de la Calidad de Establecimientos de Atención Médica. ¿Qué significa? Se retiran los incentivos para mejorar la calidad de atención hospitalaria y se operaran a como mejor les convenga. Se eliminan parámetros de competitividad para la mejora en la atención hospitalaria, parámetros normativos (NOMs), de guías de práctica clínica, y ahora las decisiones sanitarias se concentran en la voluntad de una sola persona: El ejecutivo.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora

 

 

 

 

 

 

 

domingo, 2 de julio de 2023

Una encuesta reveladora.

 


Hace unos días se presentaron en la revista Salud Pública de México un editorial, una presentación y treinta y un artículos de investigación resultantes de la métrica realizada por la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2022, mismas que resultan en la realidad del país con datos concretos y no con “los otros datos”.

 

Durante el pasado jueves 22, se dijo que la Ensanut es un proyecto emblemático de la Secretaría de Salud de México. Este proyecto permite conocer el estado de salud y las condiciones nutricionales de los diversos grupos que conforman la población mexicana, a través de datos actualizados anualmente, lo que nos ayuda a comprender mejor el panorama de la salud poblacional en nuestro país. Los cuestionarios de la Ensanut 2022 que se añadieron respecto a Ensanut 2021 fueron plomo y actividad física. Adicionalmente, se añadieron determinaciones de micronutrientes en los grupos de edad de 1 a 11 años y en mujeres con edad de 12 a 49 años. En contraste, la Ensanut 2022 dejó de investigar temas que describen cómo la población afrontó al Covid-19 en términos de cambios en su actividad física, alimentación en el hogar, conocimiento y aplicación de medidas de mitigación y prevención, afectaciones en la situación económica del hogar y percepción de aislamiento y soledad en adultos mayores de 65 años. El tamaño de muestra para la Ensanut 2022 fue mínimo por entidad de 1200 y 1100 cuestionarios. En el último año, la población infantil de nuestro país, ha sido uno de los sectores que más ha sufrido en materia de atención a la salud, con afectaciones que van desde bajos niveles de vacunación, la prevalencia de obesidad, la desnutrición en preescolares e incluso la exposición a tóxicos ambientales como el plomo. La Encuesta Nacional de Salud 2022, estimó que no se alcanza la meta de cobertura de 90%, como en otros años. En tanto, los datos muestran que la cobertura del esquema completo de vacunación en menores con dos años de edad disminuyó en 4.5 puntos con respecto a 2021. Para 2022, sólo el 26% de las y los niños de 2 años de edad tenían todas sus vacunas, mientras que un año antes, la cobertura fue de 31%. Por otro lado, los menores de entre 1 y 3 años de edad son los más afectados, ello al identificarse que las coberturas de vacunación para todos los biológicos estuvieron por debajo del nivel de cobertura útil de 95%. Asimismo, se observó una reducción significativa en el caso de la primera dosis de la vacuna triple viral (sarampión, rubéola y paperas), pues se redujo casi 11 puntos, al pasar de 72 en 2021 a 61% para 2022. Mientras que la vacunación con BCG la cual debe aplicarse desde el primer día de nacido, también tuvo una disminución importante de 8 puntos, al pasar de 86% en 2021 a 78% para 2022. Los datos recientes advierten que 37% de los menores en edad escolar entre 5 y 11 años, tienen sobrepeso y obesidad, mientras que en la población adolescente fue de 41%. Lo anterior significa un incremento importante. Estos resultados, confirman que el sobrepeso y obesidad en niños y adolescentes es un problema de salud poblacional, ya que los niveles de obesidad han aumentado en los países de ingresos bajos y medios, como es el caso de México.

 

La Ensanut 2022 confirmó que la proporción de hogares que reportó exposición a plomo fue de 16%, lo que representa 1,407,498 de niños y niñas en el país que tienen niveles de intoxicación de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana vigente. Entre las principales fuentes de exposición ambiental se encuentran el uso de barro vidriado. En tanto que las regiones con mayores prevalencias son la Pacífico Sur, Centro, Ciudad de México y Estado de México. También confirman una tendencia de incremento de hasta 600% en las conductas suicidas a nivel nacional, especialmente entre los jóvenes. En el caso de las mujeres son las que reportaron la mayor prevalencia en comparación con los hombres, tanto en pensamiento como en intentos de suicidio. Asimismo, se advirtió que los adolescentes tuvieron un incremento en intentos de suicidio de más de 600% desde la Ensanut 2006 (cuando la prevalencia fue de 1.1%) y más del doble que la prevalencia inmediatamente antes de la pandemia por Covid-19 (prevalencia de 3.9% en la Ensanut 2018). De las personas que en 2022 recibieron atención médica, 48% se atendió en servicios privados de salud, incluso, aunque tuvieran afiliación a alguna institución de seguridad social. La población que se atendió en servicios privados lo hizo en consultorios particulares. Aunque el año pasado aumentó el uso de servicios de salud públicos, esta proporción todavía es baja en México. En 2018, 41% se atendió en servicios públicos y, en 2021, 34%, donde los principales motivos por los que las personas prefieren los servicios privados son el fácil acceso, la cercanía, el precio barato, horario, y atención rápida. Revelador y aleccionador resultado.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora