El desarrollo
tecnológico ha modificado la asistencia médica con la incorporación de nuevos
recursos, que es necesario evaluar. Uno de ellos es la telemedicina, de la cual
existen experiencias que demuestran beneficios en salud, sociales y
¿económicos?
La implementación de
los servicios de Telemedicina aporta mejoría a los servicios de atención
médica, incorporando las soluciones tecnológicas actualmente disponibles a los
procesos tradicionales de salud, mejorando además aspectos cualitativos, de
eficiencia, de oportunidad y simultaneidad. Actualmente existe un
reconocimiento generalizado que el uso de las tecnologías de la información y
comunicaciones son un recurso potencial para lograr la transformación radical
que requieren los sistemas de salud en el mundo, además que facilitan la
preparación de los servicios de cuidado a la salud para los retos
epidemiológicos del futuro y los problemas aún no resueltos. Sin embargo, la
adopción adecuada y exitosa de las tecnologías mencionadas requiere que dentro
de los procesos de diseño e implementación se consideren las necesidades reales
de la población y de los profesionales relacionados de tal manera que se pueda
brindar un soporte y entrenamientos adecuados. Pero ¿es prioritario? Recientemente
una institución en Sonora mencionó el déficit de al menos 500 médicos
especialistas, vemos plantillas incompletas en hospitales y deudas
estratosféricas en instituciones como ISSSTESON. Se requiere del soporte a los
profesionales que se ubican en comunidades con acceso limitado a servicios de
capacitación especializada y continua ya que muchos de ellos, en su mayoría
pasantes de medicina son abandonados a su suerte en comunidades rurales
alejadas. A través de la integración de unidades médicas y profesionales de la
salud empleando las tecnologías telemáticas pueden establecerse servicios de
salud que pueden llegar a los pacientes sin importar su ubicación geográfica.
El incremento de la accesibilidad de las comunidades con acceso limitado a
servicios de atención especializada pudiera ser apoyado por la Telemedicina,
sin embargo la instalación de recursos especializados en las zonas rurales es
complicado por la baja productividad y la baja densidad de la población, que
decir de la inseguridad, por lo que los servicios de telemedicina son una
opción para hacer disponible recursos que favorezcan la salud de esta
población. Actualmente en México, diversos servicios estatales de salud han
puesto en marcha iniciativas encaminadas a desarrollar los servicios de
Teleconsulta dirigida a la población más vulnerable, se ha tenido el
aprendizaje de dichas experiencias que es necesario tomar siempre en cuenta las
condiciones reales de la población, de los profesionales o técnicos de salud
ubicados en dichas comunidades. Si bien es cierto que la tecnología para
solventar los problemas de comunicación de estas ubicaciones a los centros
hospitalarios y especializados existe, ha presentado el reto que radica en
diseñar adecuadamente las soluciones que apoyen en la resolución de sus
problemas locales de salud. No se trata de estar a la moda, por el contrario se
trata de realizar una explotación racional de los recursos en salud, humanos y
tecnológicos. El desarrollo de programas de telemedicina nacionales no sólo
requiere de la inversión de capital, al mismo tiempo y principalmente requiere
de una inversión de tiempo para su correcta planeación y organización. En el
caso de la medición resultados, lleva tiempo para que estos puedan ser
valorados. Existen algunas iniciativas en México que consideran la mayor parte
de los aspectos que requiere poner en marcha un programa de telemedicina, por
lo que el desarrollo de estos servicios de manera adecuada y organizada en
nuestro país es aún incipiente.
Recientemente un
diputado en Sonora subió a tribuna para hablar de este tema justificando su
implementación debido a la pandemia actual, y parecerá un buen propósito pero
habiendo tantas necesidades en la población sonorense, parece que nos quisieran
“vender espejitos”. Para la implementación de la telemedicina, se debe comentar
la dificultad del cálculo del costo-beneficio y costo-efectividad y los
estudios estadísticos, ya que los objetivos de un proyecto social no se pueden
expresar en unidades monetarias. ¿Cuánto costó el colocar internet en el
programa del sexenio anterior denominado: “México conectado”? Instituciones
públicas como hospitales y escuelas tendrían en teoría internet gratuito;
¿Conoce algunos establecimientos que no cuenten con internet? ¿Cuánto costó?
¿Resultó? El tema de telemedicina tiene un bue propósito, es definitivamente un
rumbo que a futuro no dudo que se implementará en nuestro país, pero
actualmente existen muchas otras prioridades en salud, como para que los
diputados se estén haciendo “patos”, ¿O
no?
Dr. César Álvarez Pacheco
cesar_ap@hotmail.com
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.