El progreso científico
y tecnológico ha contribuido al crecimiento sostenido de la industria cosmética
a nivel mundial. En los últimos años, el concepto de “cosmecéutico” ha generado
gran interés en el sector productivo. Sin embargo, existe una falta de legislación
respecto a este término, ya que ni la Comisión Federal para la Protección
contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) de México, ni la Administración de
Medicamentos y Alimentos de los EU. Ni Europa Cosméticos (antes la Asociación
de Cuidado Personal de Europa COLIPA), reconocen este término dentro de su
marco legal.
El crecimiento de la
industria de los cosméticos y cosmecéuticos ha ido creciendo en interrelación
con los dermatólogos. El cambio sobre todo en dermatología ha encontrado menos
énfasis en la dermatología médica y se ha incrementado en áreas de la
dermatología cosmética y cirugía dermatológica. Con esto, el dermatólogo ha
tenido que ser más consciente de los principios y de los productos en el campo
de la cosmética. El uso de estos productos como complemento a la práctica
dermatológica coincide muy bien con el incremento de productos cosméticos en el
mercado, los cuales promueven “una piel saludable para todos”. Ningún mercado
regulado se ve más afectado por la moda y el capricho, que la industria
cosmética. Es objeto de mitos y conceptos erróneos, en parte debido a las
tácticas de marketing agresivas y competitivas. Las demandas de eficacia y
potencia de los productos cosméticos pueden engañar fácilmente al consumidor y
al profesional, por igual. Por lo que definir lo que es y lo que no es, un
producto “cosmecéutico” no es tarea fácil. Sin embargo, los términos
“cosméticos” y “cosmecéuticos” si están reconocidos dentro del marco legal de
México, Estados Unidos y Europa. La falta de conocimiento de este importante
tema entre médicos, profesionales del cuidado de la piel, y los consumidores ha
llevado a muchos malos entendidos debido a la diversidad de productos
cosméticos existentes y al creciente número de productos que se encuentran
entre el límite de lo que es un cosmético y un medicamento. En México, de
acuerdo a la Ley General de Salud, los cosméticos se consideran como las
sustancias o formulaciones destinadas a ser puestas en contacto con las partes
superficiales del cuerpo humano: epidermis, sistema piloso y capilar, uñas,
labios y órganos genitales externos, o con los dientes y mucosas bucales con el
fin exclusivo o principal de limpiarlos, perfumarlos, ayudar a modificar su
aspecto, protegerlos, mantenerlos en buen estado o corregir los olores
corporales, o atenuar o prevenir deficiencias o alteraciones en el
funcionamiento de la piel sana. No se consideran productos cosméticos las
sustancias o mezclas destinadas a ser ingeridas, inhaladas, inyectadas o
implantadas en el cuerpo humano. Los cosmeceuticos son todas aquellas
sustancias o mezcla de sustancias de origen natural o sintético que tengan
efecto terapéutico, preventivo o de rehabilitación, que se presenten en formas
farmacéuticas y se identifiquen como tal por su actividad farmacológica,
características físicas, químicas y biológicas. Un fármaco es toda sustancia
natural, sintética o biotecnológica que tenga alguna actividad farmacológica y
que se identifique por sus propiedades físicas, químicas o acciones biológicas,
que no se presente en forma farmacéutica y que reúna condiciones para ser
empleada como medicamento.
Existe la preocupación
de que el uso del término cosmecéutico esté engañando a los consumidores que
piensan que estos productos están sujetos a las mismas normas que los
cosméticos regulados por COFEPRIS. Por lo que nuestro país deberá estar
preparado para un crecimiento acelerado y con un alto grado de investigación de
calidad e innovación en este sector.
Dr. César Álvarez Pacheco
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora.