domingo, 25 de octubre de 2020

Cáncer de mama y los “otros datos”.


 

El Seguro Popular se financió con recursos que el gobierno federal aportaba según el número de beneficiarios por estado; ahora se deja a discreción del ejecutivo la cantidad de dinero destinada a cada estado, lo que facilita se apoye a los gobiernos de su facción y se castigue a los de oposición. Opacidad propiciará corrupción, es apalabra que tango le gusta. Se eliminó también el Fondo de Protección para Gastos Catastróficos que funcionaba como presupuesto para financiar las enfermedades de alto costo y más complejas como el cáncer, hepatitis, cuidados intensivos neonatales, etc., y que permitía exentar del pago a los beneficiarios, particularmente los más pobres. Se eliminó todo con la pretensión de que ahora todo será gratuito para todos, y hasta hoy lo único que ha provocado es más desbalances, desabastos, desprotección, y un dolor en las familias de pacientes que han interrumpido sus tratamientos o fallecido por falta de alguno de ellos.

 

El Seguro Popular surgió con una visión de salud pública de encuentro entre individuo y sociedad, técnica y política, pensamiento y acción. Los sistemas de salud son el principal punto de contacto ciudadano con los beneficios de la ciencia: la población no es solo beneficiaria es también consumidora, financiadora y coproductora de los sistemas de salud que tienen tres objetivos: elevar el nivel de la salud, del trato digno, y mejorar la distribución con equidad. Exigen rectoría estratégica, contribución solidaria, compra efectiva, prestación con calidad, generación de recursos equilibrada, entre otros. El Seguro Popular implicaba la coordinación entre las distintas autoridades de salud, federales y locales, con demostrados resultados exitosos, según CONEVAL: pasamos en 2008 de 42.8 millones de mexicanos carentes de acceso a servicios de salud, a 19.1 millones en 2016; el porcentaje de hogares en pobreza extrema sin financiamiento de enfermedades crónicas graves disminuyó del 5.2 % en 2004, al 2% en 2016. Faltaba mucho por hacer o mejorar, pero el Seguro Popular iba en la dirección correcta. La política es el arte del bien común posible (y de evitar males) a partir de lo real, del aquí y ahora incrementalismo, realismo crítico. Pero hoy “se tienen otros datos” (¿?) Si desde el proceso de desaparición del Seguro Popular y su transformación en el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) las mujeres con esta enfermedad ya venían arrastrando problemas, con la llegada del covid-19 su situación empeoró. El pasado 19 de octubre se celebró el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer y, aunque hay muchos programas para prevenir esta enfermedad, aún hay grandes brechas en la atención de las mujeres que tienen este padecimiento. Por eso la atención a tiempo resulta clave. El cáncer de mama es el tumor maligno más frecuente entre las mujeres en el mundo. En México representa la primera causa de muerte por cáncer en las mujeres. Más de cinco mil fallecen a causa de esta enfermedad. Pese a esta evidencia, de acuerdo con un avance de la encuesta que publica la revista The Lancet, se reporta, por ejemplo, que de 142 mujeres, ubicadas en cinco estados, el 58% de quienes se atienden en una institución pública de nuestro país, no ha recibido atención ni tratamiento durante la pandemia. De las mujeres encuestadas, el 60% afirma que la desaparición del Seguro Popular y la entrada del Insabi ha sido clave en la interrupción de su tratamiento, y 67%, que ha tenido que comprar el medicamento por su cuenta. Mientras que el 33% dijo que no pueden adquirir su medicamento debido a la falta de recursos económicos. Y es que 8 de cada diez mujeres que padecen cáncer de mama en México ha visto interrumpido su tratamiento en el último año debido a la desaparición del Seguro Popular, al desabasto de medicamentos oncológicos y a los estragos de la pandemia.

 

Desde 2004, la Comisión Nacional de Protección Social en Salud, mejor conocida como Seguro Popular, cubría el tratamiento y atención del cáncer de mama y atendía a más 9 mil 500 mujeres con cáncer de mama en todo el país, a través del Fondo de Protección Contra Gastos Catastróficos, mismo que cubría los servicios de salud de alto costo como este tipo de padecimiento. Actualmente la cifra de decesos por cáncer de mama es de 15 por día, conforme a datos de la Secretaría de Salud y la cifra que proyecta para 2021 es poco alentadora, pues se estima llegue a un promedio 20 muertes diarias, lo que constituiría una cifra histórica en el país. Con la llegada de Insabi, también llegaron, la falta de reglas de operación, la falta de acceso a medicamentos, largos procesos y tiempos de espera en hospitales, falta de atención y saturación de los servicios y el desconocimiento de su operación como tal. Del mismo modo, el 72% de personas no ha presentado quejas porque no saben cómo hacerlas y solo el 28% de las pacientes las han presentado a través de oficios, directamente con las autoridades, en redes sociales o han promovido amparos. Ojalá se corrija el rumbo.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora.

 

 

 


martes, 20 de octubre de 2020

La intervención de la Senadora.

 


El proceso de enfrentamiento a la pandemia ocasionada por la enfermedad COVID-19, provoca la discusión no solo de las políticas y sistemas de salud en varios países sino, además se origina el cuestionamiento acerca los modelos de desarrollo, de las maneras de promover la investigación, la innovación y el conocimiento en sentido general. Hace algunos días, cuando el Dr. López-Gatell compareció ante el Senado, Lilly Téllez nos dio una gran muestra de cómo ser una combativa oposición.

 

En las sociedades actuales la necesidad de protección resulta insatisfecha. Simplemente los satisfactores no son suficientes y se viven situaciones de pobreza de salud generalizada. Pobreza que muestra muchas carencias, pero que también moviliza a suplirlas con formas muy creativas en los diversos contextos. Reflexionar sobre lo que pasa hoy es un modo también, de contribuir a suplantar las privaciones, cuestionarse prácticas sociales, formas de organización, modelos políticos y valores que inciden en la expresión de las necesidades humanas. Por ejemplo: ¿Cómo explicamos, los estadios de beisbol abiertos, antros, etc.; mientras las escuelas se encuentran cerradas? ¿Cómo explicamos, la necesidad de un sistema de salud de primer mundo, cuando los recortes cada vez son mayores? Si en una sociedad ante una contingencia, las pérdidas de los seres humanos resultan significativas, es menester cuestionarse el hecho de reconocer o no el carácter de desarrollada que posea la sociedad, aquella que pierde su mayor riqueza. Ello conlleva al debate acerca del desarrollo social como proceso humano donde lo esencial no sea el modo de producción que crea la mayor riqueza sino el modo de producción que crea mejores ciudadanos. Es preciso reactivar la cuestión acerca de que el objetivo de la producción debe ser las personas y no la riqueza económica. Por lo anterior podemos entender, el por que al subsecretario de Salud, López-Gatell, la oposición lo ha embestido en múltiples ocasiones dados los pobres resultados en el sistema de salud mexicano (¿Por qué al sub y no al Secretario?, vaya usted a saber) Durante su comparecencia de este martes en el Senado de la República, panistas, priístas y perredistas encararon dado el número de fallecimientos que han ocurrido en México a causa de la pandemia de COVID-19. Senadores de oposición de partidos como el PAN, y Movimiento Ciudadano cuestionaron a López-Gatell sobre temas como un posible rediseño del Sistema de Salud y el uso del cubrebocas. El Subsecretario se ha caracterizado por hacer comentarios tan polémicos como que el cubre bocas no es importante (Marzo 2020) y posteriormente declara la importancia del mismo y su utilidad. Por su parte, quien se llevó las palmas fue la ex legisladora invitada por MORENA y ahora en la bancada del PAN, Lilly Téllez quien nombró al Subsecretario de Salud, “pequeño virrey del país de las camas vacías y de los muertos en casa” por su “fallida estrategia” contra la pandemia. Durante su intervención, Téllez entregó un bastón mientras afirmaba que “con su lealtad a ciegas al presidente, usted sólo ha dado palos de ciego”. Lilly Téllez aseguró que su discurso fue aplaudido porque la asistió la razón, y reiteró que México tiene la tasa de letalidad más alta de los países con registros elevados de Covid-19. Posterior a ello, se retiró de la tribuna. Lilly Téllez formó parte del grupo de senadores de oposición de la Comisión de Salud de ese órgano legislativo quienes, con pancartas alusivas al nuevo etiquetado, señalamientos e incluso enfrentamientos verbales con otros legisladores terminaron por orillar la suspensión de la comparecencia del coordinador y vocero del gobierno del presidente López Obrador en el manejo de la pandemia de covid-19.

 

La intervención de la Senadora por Sonora no tiene desperdicio, muestra datos duros y un enérgico llamado a recuperar la salud del pueblo de México, eso precisamente comenta Victor Trujillo al señalar que “al poder se le revisa, no se le aplaude”. Cosa que no hemos visto con los otros dos senador@s por Sonora y que han estado complascientes al gobierno en turno. Es difícil asimilar las noticias que refieren en diversos estados del país; insuficientes camas, equipos de respiración artificial, capacidades en hospitales, accesorios y personal para la atención. En particular es evidente el hecho de que se demanda no solo de una red de servicios médicos especializados y de calidad, para quienes puedan costearlo, sino que también se necesitan sistemas de protección con cobertura universal, atención primaria de salud y educación para la promoción de salud al alcance de todos, que decir de los medicamentos para el cáncer. Bien por intervenciones como la de la Senadora Tellez, que exige un enfoque integrador de los diversos saberes científicos, de las políticas públicas y de la toma de decisiones para contribuir al bienestar individual y colectivo.

 

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora.

 

 

 

 

domingo, 11 de octubre de 2020

El sarampión está de vuelta.


El sarampión regresó a nuestro país después de 20 años, los afectados no tenían antecedente de vacunación ese es su común denominador. ¿Por qué una enfermedad de fácil diagnóstico hoy en día continúa siendo un grave problema de salud pública? Siendo que la estrategia de solución es eficiente y de bajo costo para una enfermedad prevenible por vacunación, que puede desarrollar graves complicaciones de salud. Veamos.

 

A nivel mundial el sarampión está de vuelta, dado que existen grupos antivacunas que defienden su postura de no aplicarlas por mitos, creencias religiosas o incluso la falsa asociación con el autismo. Esto ha generado un resultado negativo en la población, y como consecuencia una disminución de las coberturas de vacunación. Considerando el escenario epidemiológico antes descrito y el riesgo de propagación del sarampión lo mejor es fortalecer las medidas de prevención sin dejar de largo la contención de los brotes de la enfermedad manteniendo una estricta vigilancia epidemiológica para la identificación de casos probables de manera oportuna que cumplan con definición operacional de probable caso sospechoso de Sarampión. La vacunación se entiende como un proceso indispensable para evitar el riesgo de reintroducción de enfermedades que han sido controladas y prácticamente erradicadas. Las enfermedades infecciosas son una amenaza constante para la salud pública y para los sistemas de salud, ya sea que algunas tengan comportamiento estacional, otras más sean endémicas o unas más reemergentes, en ocasiones pueden presentarse de formas graves que pueden provocar desde un brote en la comunidad, infecciones asociadas a la atención de salud, o hasta una pandemia. Por ello, los esfuerzos de la comunidad científica se centran en identificarlas oportunamente, diagnosticarlas, dar un tratamiento y, sobre todo, un aspecto fundamental: prevenirlas. Entre estas enfermedades ocasionadas por un agente infeccioso se encuentra el sarampión; la cual es una enfermedad altamente contagiosa que afecta de manera exclusiva al humano. Se transmite a través de las secreciones nasales o faríngeas, tos y estornudos de las personas infectadas a los susceptibles. El virus se encuentra en el aire, o bien en las superficies, donde puede seguir activo por hasta dos horas y puede ser transmitido por un individuo desde cuatro días antes y hasta por cuatro días después de aparecer manifestaciones en piel. La mayoría de los contagiados se recuperan sin complicaciones después de una semana de presentar los síntomas antes mencionados. En sus formas más graves se presenta en niños pequeños desnutridos, con deficiencia de la vitamina A y/o con un sistema inmunológico comprometido. Uno de cada diez niños presenta infección en el oído, uno de cada veinte podría desarrollar infecciones respiratorias severas como la neumonía, uno de cada mil niños puede presentar encefalitis y uno o dos de cada mil podrían fallecer por las complicaciones. En nuestro país, después de la reintroducción del sarampión, la transmisión se volvió comunitaria y en lo que va del año se han confirmado 181 casos de sarampión;12 se ha identificado que el 81% de los casos confirmados no contaban con un antecedente de vacunación comprobable por medio de un documento oficial, como la cartilla de vacunación o similar, por lo que las personas que no pueden comprobar su registro son catalogadas como no vacunadas.

 

El resurgimiento del sarampión se debe fundamentalmente al rechazo por parte de algunos grupos de población en Europa y los Estados Unidos, los cuales han adquirido fuerza a partir de la primavera del 2019. Entre las razones más frecuentes que expresan los padres para retrasar o rechazar la vacuna para sus hijos está la preocupación por la seguridad e inocuidad de las vacunas, ya que se ha diseminado la falsa asociación entre la vacuna y el autismo. Asimismo, algunos padres consideran que sus hijos reciben demasiadas vacunas a la vez, por lo que prefieren que adquieran la enfermedad de manera natural en vez de desarrollar inmunidad a través de la vacunación. Además, se ha generado una problemática derivada de que para ingresar a centros escolares y guarderías se requiere de una cartilla de vacunación obligatoria, por lo que, si los padres o tutores forman parte del denominado movimiento antivacunas, esta condición coloca en riesgo al resto de la comunidad, pudiendo ocasionar un importante problema de salud pública. La intervención parece simple, pues la vacunación es la herramienta perfecta, altamente efectiva y segura. No obstante, es tarea de todos trabajar constantemente para lograr la aceptación de la población y las coberturas necesarias para controlar nuevamente y, de esta manera, erradicar la enfermedad del escenario mundial.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora.

 

 

 

 

 

 


El Síndrome del recomendado.

 


Pese a que Trump, no usa una mascarilla durante conferencias de prensa, hizo un llamado a toda la población a que se cubran la cara, apuntando que el uso de mascarillas muestra "patriotismo" y puede tener un efecto positivo. Lo hizo después de meses de descalificar el uso del mismo por considerarlos “antihigiénicos”. Hoy se encuentra en aislamiento.

 

Las conferencias diarias de la Casa Blanca sobre el avance del coronavirus dejaron de organizarse en abril, luego de que el presidente Trump sugiriera que el virus podría tratarse con inyecciones de desinfectante. Y claro, todos recordamos la cara del Dr. Fauci posterior a la declaración del mandatario; Pero dos meses después, en su primera sesión informativa desde aquel polémico comentario, los estadounidenses vieron a un presidente menos espontáneo que hizo eco de las recomendaciones de los altos funcionarios de salud pública de la Casa Blanca cuando dijo: "Probablemente, desafortunadamente la situación irá a peor antes de que mejore". "Es algo que no me gusta decir", prosiguió. Comenzaba a mostrar un poco de sensatez, sin embargo se encontraba en un dilema en mostrar debilidad o no, ante su rival Joe Biden que hoy se encuentra con escasos puntos por arriba del mandatario estadounidense en las preferencias de los votantes. Posteriormente Trump declaraba que su país tenía la mas baja tasa de mortalidad que cualquier otro lugar en el mundo, pero según la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos, ocupa el décimo lugar entre los 20 países más afectados, medido por su tasa de mortalidad por la enfermedad. También ha registrado mas de 7 millones de contagios y mas de 200 000 fallecidos. Tanto Boris Johnson como Jair Bolsonaro vivieron las inclemencias del virus al grado de llegar a terapia intensiva el primero y al hospital el segundo. Ninguno utilizaba cubre bocas y desestimaban el virus en sus respectivos países, hoy Trump de 74 años se encuentra en el Hospital y sus médicos dicen se encuentra “bien”. ¿Subirá puntos Trump en las encuestas por estar infectado? y ¿qué sucede si el presidente ya no puede desempeñar sus funciones?, ¿servirá de algo que haga ver que él y Melania son tan cercanos que sufren la enfermedad juntos?. Lo cierto es que ayer por redes se dejó ver una fotografía de el mandatario con la vocera Hope Hicks, quien por cierto también dio positivo a covid pero no se encuentra en hospitalización. Pero ¿cómo está realmente Trump? Según sus médicos y la conferencia que anunciaron un día después de hospitalizarlo, han pasado ya mas de 4 días desde el diagnóstico y esto es importante ya que los primeros 7 a 10 días son los mas importantes para determinar el curso de la enfermedad; el pasado jueves comenzó con tos leve y congestión nasal, posteriormente inicia con fatiga por lo que se decidió su traslado al hospital mas cercano a las afueras de Washington. Un portavoz de la Casa Blanca (Que no es Hope Hicks) explicó en un comunicado en la tarde del viernes que Trump "se encontraba con buen ánimo, tenía síntomas leves y había estado trabajando todo el día". "Cómo medida de precaución, y siguiendo la recomendación de su doctor y expertos médicos, el mandatario trabajaría desde las oficinas presidenciales de Walter Reed (uno de los hospitales militares más grandes y prestigiosos de Estados Unidos. Es el centro médico al que suelen acudir los presidentes estadounidenses para su revisión anual.) durante los próximos días". En su primer día de internación recibió dosis de anticuerpos monoclonales y del fármaco antiviral remdesivir como parte de su tratamiento, y aunque no es lo recomendado en las fases iniciales pudo ser provocado como algo que conocemos como el Síndrome del recomendado; muy común en políticos y/o figuras públicas quienes creen que pueden recibir un trato VIP y especial.

 

El "síndrome del recomendado" se podría definir como la aparición de complicaciones no habituales y de imprevistos, muchos ellos difíciles de explicar, en pacientes concretos en los que la intención es llevar a cabo una atención más esmerada y personalizada ya que son personas de mayor renombre o han sido recomendados por motivos de posición social, fama, parentesco, etc. Es la consecuencia de muchas buenas intenciones que, de manera involuntaria, se acompañan de una actuación poco acertada. En los "recomendados" se procura a dar la misma atención pero con más esmero. De hecho, el mejor modo de prevenir el "síndrome del recomendado" es intentar mantener unas líneas de actuación básicas comunes a todos los enfermos. Y examinar periódicamente la propia conducta ante estos pacientes para detectar y corregir las desviaciones que se puedan introducir en la práctica habitual. Es preciso tomar conciencia de esta realidad para poder ir corrigiéndola, poco a poco. El medio más eficaz para prevenir el "síndrome del recomendado" es intentar mantener las líneas de conducta habituales, similares a las que se tiene con los demás enfermos.

Dr. César Álvarez Pacheco

cesar_ap@hotmail.com

@cesar_alvarezp

Huatabampo, Sonora.